Mayo, el mes dedicado a la Virgen María
Desde el inicio mismo de la Iglesia, la Virgen María está siempre presente en la vida de la comunidad cristiana. Su presencia es como la de una buena madre en la familia, que da calor, amor y consuelo a todos, y que ayuda a formar y mantener unida la comunidad cristiana. Puede que su presencia sea muchas veces imperceptible, pero no deja de ser real y eficaz, sosteniendo la familia con amor y entrega.
En el curso de los meses, celebramos con frecuencia a María, la Madre del Hijo de Dios y madre nuestra. Mayo es el mes dedicado por excelencia a la Virgen María en toda la Iglesia para honrarla con flores y cantos, para rezarla, para agradecer su presencia y su servicio, para invocar su protección, para sentirnos amados por ella y para dar gracias a Dios por tan buena Madre. Mayo es, sobre todo, un mes para contemplar a la Virgen Maria e imitarla en el camino de la fe cristiana, y de nuestra vida y misión comunitaria como Iglesia del Señor. Leer más