Cáritas Diocesana concluye el curso con una Eucaristía en Castellón
La parroquia de La Sagrada Familia de Castellón acogió ayer la Eucaristía de fin de curso de Cáritas Diocesana de Segorbe-Castellón, a la que asistieron trabajadores y voluntarios de la entidad.
El Delegado Episcopal en Cáritas Diocesana, D. Sergio Mendoza, agradeció la tarea constante y diaria de los voluntarios y voluntarias, así como del personal laboral de la entidad, destacando que su labor no se limita a acompañar y solucionar los problemas materiales de las personas que acuden a Cáritas, sino que, además, les “proporcionan la necesaria esperanza” para que puedan vivir con dignidad.
Por su parte, el Director de Cáritas Diocesana de Segorbe-Castellón, D. Francisco Mir, animó a las personas voluntarias y a los trabajadores y trabajadoras de Cáritas a “renovar su compromiso” para luchar contra la pobreza, y ayudar y acompañar a los colectivos más vulnerables.
Aunque Cáritas no cierra por vacaciones, esta Eucaristía de fin de curso sirvió para dar gracias al Señor por todo lo vivido y compartido durante estos últimos meses y para renovar la fe, la esperanza y el compromiso con las personas más desfavorecidas.