Ayuda a la Iglesia Necesitada organiza por primera vez en Castellón un funeral por los difuntos benefactores y por los que mueren en soledad
Ya es tradicional que cada año, durante el mes de noviembre, la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) organice un funeral por los benefactores difuntos, sus familiares, así como por todas «las personas por las que nadie reza o fallecen en soledad». Este año, el acto se celebrará por primera vez en la Diócesis. La Misa será el martes 17 de noviembre a las 20h en la S.I. Concatedral de Santa María, en Castellón.
En esta ocasión, también se tendrá un recuerdo muy especial por los fallecidos por la Covid-19. Un comunicado de la entidad explica que «solo Dios se hace esperanza y sostén en una realidad tan dura para la persona y la familia. Nuestra oración la ponemos en el corazón de Dios para que les transmita paz a todos».
6.000 proyectos en el mundo
AIN fue iniciada por el P. Werenfried van Straaten en 1947 para ayudar a la Iglesia católica en países de verdadera necesidad, a los miles de refugiados y a los cristianos perseguidos en el mundo a causa de su fe. Anualmente apoya alrededor de 6.000 proyectos pastorales y de emergencia humanitaria en más de 145 países. El Papa Pío XII reconoció la entidad como fundación pontificia. Su financiación se nutre exclusivamente de donativos de benefactores y la ayuda se destina a los proyectos y necesidades expresados por los miles de misioneros y religiosos de la Iglesia católica que están presentes en los países más necesitados.
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