La parroquia del Carmen del Grao de Burriana y la gente del mar colaboran para aliviar los efectos del confinamiento
La parroquia de la Virgen del Carmen en el Grao de Burriana sigue comprometida en “hacer presente a Jesucristo en nuestra sociedad”, asegura su párroco, Antonio Losas. Y lo hace vinculada con su gente: la gente del mar. Al inicio del confinamiento los pescadores entregaron varios capazos de pescado fresco de la Lonja local que se repartió entre familias necesitadas. La Cofradía del Santísimo Cristo del Mar, por su parte, organiza un concurso para niños con motivo de la fiesta de “les Creus de maig”. Así alivia el “aburrimiento” de los más pequeños y ayuda a las familias y los comercios locales con los premios.
La Lonja del Puerto de Burriana suele donar a la parroquia los excedentes cuando no se vende la pesca. Así lo ha mantenido, aunque la actividad ha descendido mucho estas semanas. En cambio las peticiones de ayuda dirigidas a la parroquia se han multiplicado. Hasta ahora la Cáritas del Carmen atendía a 260 personas. En los últimos siete días se han sumado 30 familias. “Están volviendo las personas que habíamos atendido a causa de la crisis del 2008 y que habían conseguido tirar adelante. Están las mujeres que limpiaban en casas, los feriantes… Son gente que conocemos y ayudamos directamente porque lo necesitan”, explica Antonio Losas.
Concursos solidarios para niños
Otro aliado de la parroquia ante esta pandemia es la Cofradía del Santísimo Cristo del Mar. Durante la Semana Santa organizó un concurso de dibujos entre los niños de la población que tuvo una excelente participación y premios para los ganadores con vales de 100, 50 y 30€. Ahora repiten la experiencia con las fiestas de “Les Creus de maig”, invitando a elaborar el tradicional vestido de las cruces y colgarlas en los balcones.
El párroco explica que “así ponemos nuestro granito de arena para apoyar al pequeño comercio que en estos momentos está pasándolo mal”. Los niños, por su parte, tienen la oportunidad de participar en una tradición con un profundo contenido catequético. Esta celebración mantiene la invención de la Cruz de Cristo (desde la reforma litúrgica unificada a la exaltación de la Santa Cruz, el 14 de septiembre). Las dominicas han elaborado un tutorial explicando cómo hacer las flores que las decoran.
Muy emotivo