En defensa de la toda vida humana
Queridos diocesanos:
Ante la presentación en el Congreso de los Diputados diversas iniciativas legislativas sobre la eutanasia y el suicidio asistido, el tema vuelve ser actual en la opinión pública. Para hacer social y legalmente aceptable la eutanasia, muchas veces se manipula el lenguaje. Se llama muerte digna a lo que no es sino la eliminación de un ser humano; se juega con el miedo ante el sufrimiento antes de la muerte o se suscita una falsa piedad con el que sufre, que no lleva al compromiso con él, sino a su aniquilación. A veces se aplica un criterio tan relativo como ‘calidad de vida’ para decidir quién tiene derecho a seguir viviendo o ha de ser eliminado. Algunos presentan incluso la eutanasia y el suicidio asistido como respuestas viables y aceptables al problema del dolor y del sufrimiento; pero sabemos que, si bien hemos de hacer todo lo posible para superar el sufrimiento, no está en nuestras manos extirparlo del mundo por completo, porque no podemos desprendernos de nuestra limitación” (Benedicto XVI, Spe Salvi, 3). Leer más