La Diócesis de Segorbe-Castellón con la Magdalena
Este curso la Diócesis de Segorbe-Castellón entra de lleno en las fiestas fundacionales de la ciudad con dos días clave en el mes de marzo: el pasado domingo 04 y el próximo sábado 10. A falta de que dé lugar la ofrenda a la patrona, ya es posible compartir las experiencias vividas en el inicio de la Magdalena.
Como ya se anticipó en la web hace unos días, estas fechas tienen un significado de profunda raíz cristiana, por lo que la Iglesia de Segorbe-Castellón no ha dejado pasar la oportunidad, un año más, de caminar hacia la conversión en esta Cuaresma de 2018.
Tras la misa de peregrinos, tanto el el canto gregoriano del Exurge como el O vere Deus sirvieron como punto de partida para la romería en la Concatedral de Santa María, acto que presidió Monseñor Casimiro López y en el que participaron las autoridades municipales, provinciales y autonómicas. Se vivió un itinerario repleto de sorpresas, entre ellas el temporal: desde la ermita de Sant Roc hasta la Magdalena se puso a llover, lo que provocó que muchos romeros desistieran y se quedaran atrás.
Tras la parada del almuerzo y ya llegados a la ermita de Santa María Magdalena, el señor obispo aprovechó el momento propicio de la Eucaristía para instar a los presentes al encuentro con el Señor, lo que sin duda «daba sentido a la jornada de romería penitencial» que estaban viviendo.
Fueron multitud de castellonenses, niños, jóvenes y enfermos los que mostraron su cordialidad con D. Casimiro López, quien se paraba con frecuencia a devolverles el afecto. El punto de inflexión en el recorrido de veneración se hizo allí mismo, con una fraterna comida de todos los presentes.
Sin embargo, el itinerario no terminaría ahí. Los participantes se pusieron de nuevo en marcha para hacer la Torná, como todos los años, deteniéndose en las carmelitas del Caminás y en la Basílica de la Virgen de Lledó. Desde el siglo XVI se cumple esta tradición, y se volvió a realizar este mismo domingo III de Cuaresma.
Monseñor Casimiro López participó también de la vuelta y llegada a la basílica, acompañando a los sacerdotes David Escoín y Carlos Dolz, quienes llevaban la santa reliquia. A recibirles salió Don Josep Miquel, prior de Lledó, quien se sumó a la misma exhortación del obispo, recordando las raíces cristianas de la fundación.
Tras esta parada, los romeros se dirigieron de nuevo al punto de partida, a la Iglesia Mayor para concluir la romería. Pero antes, y como desde hace 700 años, pasaron por la plaza Forn del Pla, donde se conmemoró el encuentro con la recepción de la cruz.
La Patrona recibirá la ofrenda floral
Tras una semana desde estos actos, concretamente el próximo sábado, dará lugar la ofrenda floral a la Patrona. La cita de máxima devoción a la Virgen será en la Basílica Nuestra Señora del Lledó, patrona de la ciudad.
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