La Parroquia Santiago Apóstol de la Vall celebra su 50 Aniversario

Ayer miércoles 25 de julio hubo una celebración de la Eucaristía y una procesión con motivo del medio siglo de vida de la Parroquia de Santiago Apóstol de la Vall d’Uixó.

Ya en la oración inicial de la Santa Misa, Monseñor Casimiro López Llorente dejó claro que era «una misa de acción de gracias porque el Misterio Pascual» se hacía actual en ese momento, por lo que, seguía, «tenemos el gozo de celebrar este misterio hoy por los 50 años de la comunidad parroquial«.

Los saludos del Obispo

En la homilía, después de la liturgia de la Palabra, Monseñor tuvo unas palabras de bienvenida para todos los párrocos que habían estado en Santiago Apóstol, incluido el actual, y dio las gracias por la asistencia a los diáconos, catequistas, comisión de fiestas, cofradía y demás fieles que acudieron a la celebración.

El Obispo dijo que se celebraba un memorando de «tantos años en los que el Señor ha dado tantos dones del Espíritu Santo«, un acto por el que había que «dar gracias a Dios por los sacerdotes y demás obras de caridad» suscitados. Asimismo, argumentó que «al mirar al pasado hemos de mirar también al presente para que el Señor siga dando fuerzas a los miembros de la comunidad parroquial para seguir viviendo como cristianos«.

Don Casimiro habla de Santiago Apóstol como ejemplo de santidad

Refiriéndose a la festividad de Santiago Apóstol, señaló que «era uno de los predilectos discípulos de Jesús, a quien le confió el honor del martirio, de derramar su sangre por Él a manos de Herodes, y de presenciar su propia agonía en Getsemaní así como su transfiguración». Don Casimiro destacó tres puntos de santidad de Santiago que debían reflejarse en un cristiano actual: «ser creyente, discípulo y testigo«.

También tuvo palabras para los fieles de la comunidad, a quienes exhortó a «escuchar la Palabra de Dios, una palabra viva que nos da ahora a cada uno de nosotros y nos interpela». Del mismo modo les animó a «vivir la Eucaristía, el misterio más grande de la Fe en el que Cristo derrama su sangre por nuestros pecados». Asimismo les invitó a «vivir en comunidad reinando la paz, el respeto, la concordia y el amor fraterno como en aquella comunidad cristiana de Santiago».

Evangelizar a Cristo en la actualidad

El Obispo aseguró que «no es fácil hablar de Cristo en la sociedad actual, pues ha decidido vivir de espaldas a Dios, aunque nuestra misión es anunciar su muerte y resurrección para que la humanidad tenga vida». Por último, se dirigió a los feligreses parroquiales para decirles que la autenticidad de su Fe se manifestaría en «obras de caridad, justicia y amor«, siendo que «esta comunidad parroquial ha de ser un signo vivo en los alrededores».

Fue el párroco, Don Julio Alonso Santos, quien expresó que se sentía «muy agradecido al Señor por conceder celebrar los 50 años en la parroquia». Del mismo modo, aseguró su alegría por la asistencia del señor Obispo al acto de acción de gracias a Dios, y también se encomendó al santo para, «por su intercesión, poder continuar con la Nueva Evangelización«.

La celebración de la Eucaristía dio paso a una procesión por las calles del barrio de Toledo, donde está situada la Parroquia de Santiago Apóstol.