Franciso Escura Foix, coadjuntor de l´Alcora en 1926, será beatificado el 16 de octubre
El próximo 16 de octubre serán beatificados, en la Catedral de Córdoba, 127 mártires de la persecución religiosa en España entre 1936 y 1939. Uno de estos mártires es el Siervo de Dios Francisco Escura Foix, natural de Benicarló (22 de mayo de 1898).
Fue ordenado sacerdote, el 23 de mayo de 1923, en el Seminario Conciliar de Tortosa, Diócesis en la que desempeño varios cargos. El 1 de febrero de 1926 tomó posesión como coadjutor de la parroquia de Ntra. Sra. de la Asunción de l´Alcora, actual Diócesis de Segorbe-Castellón.
Mientras servía en esta parroquia, su Rector en el Seminario, el Beato Mártir José María Peris Polo, le informó de que la plaza de sochantre en la Catedral de Córdoba quedó vacante. Pasó a ser M.I. Canónigo Sochantre de Córdoba el 10 de febrero de 1928.
Siempre pasaba sus vacaciones en su tierra natal, en la que encontró el martirio el 6 de septiembre de 1936. Poco se sabe sobre su muerte y sepultura. Según D. Álvaro Año, “vino a refugiarse en su casa. Allí le escondían en una cisterna vacía que tenían, como a José. Y, también como José, fue vendido, pero no por sus hermanos, sino por una persona amiga suya que lo denunció (según dicen). Lo metieron en la cárcel (…) Posiblemente lo subieron a un coche y no se sabe dónde lo mataron. Dicen si lo echaron a un pozo en el término de San Jorge donde metieron a muchos. (Hay un monolito en la carretera). Era el 6 de septiembre de 1936”.
Su partida de defunción certifica que falleció el 6 de septiembre de 1936 a consecuencia de hemorragias; pero este dato aparece escrito sobre un texto borrado previamente y que resulta totalmente ilegible, y además aparece en blanco el lugar de la sepultura.
“Estoy seguro -escribe D. Tomás Sanz-, que el Señor ya le ha dado la gloria, se lo merecía por su ejemplaridad sacerdotal, confirmada con la sangre del martirio”.