La Adoración Nocturna se une en oración por las vocaciones
Ayer noche en el Seminario Diocesano Mater Dei, la Adoración Nocturna Femenina y Masculina, ANE Y ANFE, se unieron en una vigilia de oración y adoración por las vocaciones.
A las 22.00h daba comienzo el acto con la acogida de los participantes, seguida de la procesión de las banderas en la explanada frente al acceso principal de la Iglesia Mayor del Seminario, y el rezo del Santo Rosario. De la mano de María, Santa Madre de Dios, implorando su intercesión se meditaban y rezaban los Misterios Gozosos (La Encarnación del Hijo de Dios, La Visitación de Nuestra Señora a su prima Santa Isabel, El Nacimiento del Hijo de Dios en el portal de Belén, La presentación de Jesús en el Templo, El Niño Jesús perdido y hallado en el Templo). Numerosos fieles acudieron a la convocatoria conscientes de la fuerza de la oración, principal aportación de esta Asociación de fieles cuya principal actividad es la adoración, durante la noche, ante el Santísimo Sacramento por turnos de vela.
De acuerdo con su principal razón de ser, los adoradores se reúnen durante la noche, para orar ante el Santísimo Sacramento, celebrando la misa y estableciendo turnos de vela. De forma extraordinaria, también se celebran vigilias y encuentros de oración y adoración tal como sucedió anoche en el Seminario Diocesano haciéndolo por las vocaciones.
El Obispo de la Diócesis, Monseñor Casimiro López Llorente, acudió al encuentro y agradeció a los organizadores la iniciativa pues, como advierte en su carta de este domingo «todos debemos comprometernos en la pastoral vocacional y en la promoción de nuevas vocaciones». Es necesaria «la oración personal y comunitaria más intensa al Dueño de la mies, para que envíe obreros a su mies». Para nuestro Obispo, «toda vocación es una gracia de Dios para su Iglesia; un don que hemos de pedir con humildad pero con insistencia». Con la oración de ayer noche se hacía patente la comunión de los fieles con D. Casimiro y su petición.
Al rezo del Santo Rosario, y fieles a su finalidad, miembros de la ANE y la ANFE establecieron turnos de vela ante el Santísimo Sacramento con el fin de cultivar la oración y la interioridad e interceder por aquellos que están en proceso de discernimiento o por aquellos otros a los que el Señor llamará al servicio de la Iglesia.