El Consejo de Pastoral avanza en la preparación de un Directorio de Familia
La redacción de un Directorio Diocesano de Pastoral Familiar es uno de los grandes temas en el que sigue avanzando el Consejo de Pastoral celebrado este sábado 9 de junio. Hace un año ya comenzó la reflexión a partir del Directorio de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y a la luz de la Exhortación Apostólica Amoris Laetitica, y en la permanente reunida en abril se decidió continuar el trabajo. El segundo punto del orden de día ha sido el borrador de la Programación Pastoral del próximo curso.
En el Consejo de junio del 2017 se comenzó por trazar una descripción de la situación de las familias a través del testimonio de tres matrimonios. En la reunión de noviembre, ya se abordaron por grupos los capítulos segundo y tercero del Directorio de la CEE, dedicados a la preparación y celebración de la boda.
Este sábado se ha tratado el capítulo cuarto, que trata la pastoral que concierne el crecimiento de la vida cristiana, el acompañamiento de los primeros años de los nuevos esposos, el servicio a la vida, la función educativa de la familia y situaciones especiales, como los matrimonios sin hijos, con enfermos o discapacitados, las familias mono-parentales, los huérfanos, los ancianos, las viudas, los emigrantes o las situaciones de maltrato.
Respecto a la programación diocesana, se sigue el desarrollo de los objetivos planteados en el Plan Diocesano de Pastoral, que entrará en su cuarto año. En continuidad con este curso, centrado en la iniciación cristiana con el bautismo, se dará acentuarán el resto de sacramentos: la Eucaristía y el domingo como día del Señor, la reconciliación, la unción de enfermos, el matrimonio y el orden. También se prestará atención a los sacramentales, la piedad popular y las devociones.
Participación de los fieles
El consejo Diocesano de Pastoral expresa la participación institucionalizada de todos los fieles cristianos -sacerdotes, diáconos permanentes, religiosos y laicos- en la misión de la Iglesia diocesana. Está compuesto por 43 miembros, de los que 30 han sido elegidos en sus zonas pastorales y arciprestazgos, así como entre los religiosos, diáconos permanentes, y delegaciones diocesanas. Según el segundo artículo de sus estatutos este órgano consultivo “posibilita al Obispo conocer el parecer de sus fieles en aquellas cuestiones que son motivo de atención o estudio por la Iglesia diocesana”.
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