La virtud de la esperanza centra el retiro sacerdotal de Adviento
Una buena parte de los sacerdotes de la Diócesis participaron el lunes pasado en el retiro de Adviento organizado por la Vicaría para el Clero y que tuvo como predicador al director del secretariado de la Comisión Episcopal para el Clero, Juan Carlos Mateos. El tema fue la esperanza, ya que según el ponente es «el pulmón del sacerdote porque donde los otros no ven solución, nosotros tenemos una mirada mayor puesto que Dios tiene la última palabra».
Juan Carlos Mateos definió la esperanza como un «deseo confiado» que supera un optimismo natural: «Donde ya no cabe la esperanza a nivel humano, queda la carta de que Dios es fiel, cumple sus promesas y hará su obra». Para vivirlo, advertía, es imprescindible una «intensa vida espiritual» y cultivar la virtud en cuestión hacia Dios mismo y, también, hacia la Iglesia concreta en la que se vive.
La jornada, que se desarrolló en el centro de espiritualidad de la Sagrada Familia de las Hijas de la Caridad en Castellnovo. El programa alternó momentos de meditación con amplios espacios de oración ya que, como afirmaba el ponente al comenzar, «lo más importante en un tiempo de retiro no es lo que se dice, sino lo que se reza».
Durante el tiempo de Adviento
En referencia al trabajo de reflexión que están haciendo los sacerdotes en la Diócesis, el director del secretariado de la Comisión del Clero explicaba que el tiempo de Adviento es un momento propicio para «renovar nuestro sacerdocio por la contemplación del misterio de la encarnación, y a la luz de esta contemplación ponernos al servicio de los hombres».
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