El IDCCRR cumple 20 años formando para dar testimonio de la fe
En 1999 se creaba el Instituto Diocesano de Ciencias Religiosas. Desde entonces, 1.138 alumnos han seguido sus cursos de Antropología, Biblia, Dogmática, Moral, Liturgia y Pastoral. Esta noche, miércoles 2 de octubre, Mons. López Llorente ha entregado los certificados a los que cursaron las asignaturas el año pasado. El acto se enmarcaba en la apertura del curso del propio Instituto y del Centro Superior de Estudios Teológicos (CSET) Mater Dei, donde estudian los 15 seminaristas y 13 aspirantes y candidatos al diaconado permanente.
El evento comenzaba con la celebración de la Eucaristía. El Obispo explicaba en la homilía que “antes de enviar a la misión, el Señor nos llama a estar con Él para conocerle, intimar con Él, llenarse de Jesús para llevarlo a los demás”. Mons. López Llorente ha insistido una y otra vez que si bien la formación intelectual es necesaria, no hay que perder de vista que el objetivo es la evangelización: “Tenemos que dejar que lo aprendido cale en el corazón porque aquí no se trata de una teoría, sino de una Palabra viva”. Y añadía: “La teología y el estudio se hace desde la oración porque es ahí donde percibimos y experimentamos lo que escuchamos en clase. Y todo ello para ir a evangelizar”.
El CSET Mater Dei, por su parte, llega a la mayoría de edad al cumplir 18 años de la nueva etapa que comenzó en el 2001. Desde entonces los seminaristas se forman en Castellón siguiendo el sexenio pedido por la ratio para los candidatos al sacerdocio: dos años de filosofía y cuatro de teología. Uno de los mejores activos del CSET es el plantel de profesores, con nueve doctores y siete licenciados.
Sobre los ángeles
La apertura de curso de los dos centros de formación diocesanos ha contado con una lección inaugural a cargo del Héctor Calvo, profesor de dogmática. A raíz de la fiesta de los Santos Ángeles Custodios, el tema ha sido, precisamente, los ángeles en la Iglesia y la vida del cristiano. El ponente ha remarcado su existencia, su condición de seres creados y su esencia pura espiritual. Citando a Santo Tomás de Aquino, el “Doctor Seráfico”, ha explicado que ante la fragilidad del hombre los ángeles son “como un hermano mayor que nos ayuda a mantenernos fieles a Cristo”.
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