Ante las preguntas de si se puede tener la catequesis preparatoria de los sacramentos de Iniciación cristiana (Primera Comunión y Confirmación) en los colegios, y dada la posibilidad que ofrecen algunos centros concertados y privados de impartirla, recordamos la necesidad de intensificar la coordinación entre la familia cristiana, primera responsable de la educación en la fe, la parroquia y la escuela. La Conferencia Episcopal Española en el documento “Orientaciones pastorales para la coordinación de la familia, la parroquia y la escuela en la transmisión de la fe” (25 de febrero de 2013), recuerda la importancia de esta coordinación: “Una de las primeras respuestas que nuestra Iglesia debe dar es la de aunar esfuerzos, compartir experiencias, dedicar personas y priorizar recursos, con el fin de coordinar objetivos y acciones entre los diversos ámbitos: familia, parroquia y escuela, en orden a la transmisión de la fe, hoy” (nº 5).
Unida al proceso de Iniciación cristiana y la transmisión de la fe, e inseparable de ella, está la participación en la Eucaristía. Ella es “la cumbre a la cual tiende la actividad de la Iglesia y al mismo tiempo la fuente de donde mana toda su fuerza…” (Sacrosanctum Concilium, 10). La Eucaristía es el centro de la vida de todo cristiano. Los cristianos “no podemos vivir sin la Palabra del Señor», “no podemos vivir sin el Sacrificio de la Cruz», «sin el banquete de la Eucaristía”, «sin la comunidad cristiana”, “sin la casa del Señor», y sin “el Domingo, día del Señor, que da luz y sentido a la sucesión de los días de trabajo y de las responsabilidades familiares y sociales» (¡Volvemos con alegría a la Eucaristía!, Congregación para el culto divino, agosto de 2020).
Para resaltar la importancia de la unión que debe existir en el proceso de Iniciación cristiana entre la catequesis, la participación en la Eucaristía y la comunidad parroquial, debemos tener en cuenta una serie de pautas a la hora de organizar la catequesis de Iniciación cristiana coordinando los esfuerzos entre la familia, la parroquia y la escuela:
- La parroquia es el ámbito privilegiado para realizar la Iniciación Cristiana en todas sus facetas catequéticas y litúrgicas del nacimiento y del desarrollo de la fe, el lugar donde se vive y celebra la fe. Por lo tanto, una vez que el Párroco o el Arcipreste ha coordinado la catequesis con aquellos centros educativos que ofrezcan la posibilidad de catequesis de Iniciación (Bautismo en edad catequética, primera Comunión y
Confirmación) debe hacerse en la parroquia propia, indicando que va a realizarse en el centro educativo. - Tanto las parroquias como los centros educativos utilizarán los catecismos “Los primeros pasos en la fe”, “Jesús es el Señor” y “Testigos del Señor” de la CEE, de obligado uso en nuestra diócesis. La catequesis será semanal tanto en los colegios como en las parroquias. La clase de religión no sustituye a la catequesis; ambas son complementarias.
- Los padres se comprometen a participar con sus hijos catequizandos el domingo, día del Señor, en la celebración eucarística de la parroquia (preferentemente en la Misa de catequesis si se celebra). Hay que cuidar la pertenencia a la propia comunidad parroquial, que será la comunidad de referencia de los catequizandos en el presente y también cuando finalice la educación escolar.
- Los padres son los primeros responsables de la educación de sus hijos y de la transmisión de la fe. Como expresión de este compromiso adquirido en el bautismo deberán acudir a las reuniones que se programen en la parroquia para la coordinación de la catequesis, su formación cristiana personal o para ayudarles en la catequesis de sus hijos.
- Los catequizandos participarán en el resto de actividades y celebraciones que se organicen en la parroquia para todos los niños, adolescentes o jóvenes de catequesis.
- La parroquia, a través del sacerdote o de un catequista encargado, mantendrá un contacto fluido y permanente con los padres y el catequista que el colegio haya dispuesto para la catequesis en el centro.
- Después de los dos años de preparación establecidos en la Diócesis, el director del colegio certificará por escrito que el catequizando ha participado en las catequesis y las actividades propias y, por tanto, se le considera preparado para recibir el sacramento.
- Quienes hayan recibido las catequesis en los colegios recibirán la Primera Comunión o la Confirmación en la parroquia propia, junto con los demás grupos de catequesis parroquiales en una de las fechas dispuestas al efecto. No se puede realizar una celebración particular para el grupo de catequesis del colegio.
- Los colegios y la parroquia deberán invitar a los niños y adolescentes a continuar la catequesis para profundizar en su fe y completar en su momento su Iniciación Cristiana con la recepción del Espíritu Santo en el Sacramento de la Confirmación.
La educación en la fe es tarea de toda la comunidad cristiana y se desarrolla en diferentes ámbitos. Todos, familia, parroquia y escuela, debemos caminar unidos, acordes y concordes en el proceso de la Iniciación cristiana de nuestros niños y adolescentes.
Espero que esta nota sirva para despejar dudas y de ayuda en la tarea de la Iniciación cristiana a las parroquias, familias y colegios de nuestra Iglesia diocesana.
En Castellón, a 3 de noviembre de 2022
Javier Aparici Renau
Vicario General