San Vicente inaugura las Charlas teológicas del arciprestazgo de Segorbe
Una vez pasadas las primeras comuniones, el arciprestazgo de Segorbe organiza desde hace un sexenio una serie de Charlas Teológicas para la formación de catequistas y de los fieles comprometidos en las comunidades parroquiales. En las ponencias se tratan los principales temas de la vida diocesana y eclesial, y en esta edición no podía faltar el VI centenario de la muerte de San Vicente Ferrer. D. Miguel Navarro Sorní, catedrático de historia de la Facultad de Teología de Valencia, presentó al santo dominico como “un gran evangelizador que sigue siendo actual en nuestros días ya que el Papa nos está pidiendo que salgamos a evangelizar al mundo entero”.
El Año Santo Vicentino se inauguró en la Diócesis de Segorbe-Castellón con una solemne celebración en la Catedral, que es templo jubilar junto con la parroquia de San Vicente de Castellón y la ermita de La Vall d’Uixó dedicada al predicador dominico. Desde entonces son numerosos los grupos y parroquias que peregrinan a la Sede para lucrase con las gracias jubilares, según atestigua D. Federico Caudé, arcipreste de Segorbe.
Liturgia e iniciación cristiana
El resto de charlas de este ciclo formativo estuvieron dedicadas a la liturgia y a los sacramentos de la iniciación cristiana, siguiendo los objetivos pastorales del curso en la Diócesis. La primera contó con la intervención de D. Antonio Sanfélix, Delegado Diocesano de Liturgia y Música Sacra. El ponente reivindicó la importancia de vivir e involucrarse en las celebraciones para sacar el mayor fruto de ellas.
Miguel Payá Andrés, catedrático emérito de la Facultad de Teología de Valencia, expuso la pastoral referente a los sacramentos de la iniciación cristiana: “Son temas que estamos viviendo en las parroquias con las catequesis de primera comunión y de confirmación, así como cuando los padres vienen a pedir el bautismo para sus hijos”, argumenta D. Federico Caudé.
«Todos nos enriquecemos»
A lo largo de los años, este ciclo de conferencias ha arraigado en Segorbe. El arcipreste confirma que “todos nos enriquecemos un poco. La gente viene con interés, y se van diciendo que ha valido la pena y con el deseo de aplicar lo recibido a la pastoral y la vida de las parroquias”. En esta edición han acudido una media de 50 personas, entre las que también estaban la comunidad de Terciarias Capuchinas de la ciudad y las Hijas de la Caridad de Castellnovo.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!