El Seminario Diocesano Mater Dei acogió ayer una jornada de formación permanente para los sacerdotes y diáconos de la Diócesis de Segorbe-Castellón, centrada en la necesidad de ser acompañados en el camino de la santidad y en el ministerio. Convocada por el Obispo y organizada por la Vicaría para el Clero, se enmarcó dentro del objetivo pastoral de este curso, dedicado de una forma especial al acompañamiento, y se desarrolló en un ambiente de reflexión y fraternidad.
.
D. Casimiro, al iniciar la jornada, agradeció la presencia de los ponentes y subrayó la importancia de estos espacios de reflexión y formación, resaltando la necesidad de que los sacerdotes también reciban acompañamiento para seguir llevando esperanza cristiana a los fieles. Esta jornada también estaba planteada como una oportunidad para profundizar en el arte de acompañar a los demás, especialmente en el contexto de la misión pastoral que la Diócesis está viviendo este año.
.
La primera intervención estuvo a cargo del P. Adrián López Galindo, jesuita, quien ofreció una profunda reflexión sobre la importancia del acompañamiento espiritual, tanto en la vida personal de los sacerdotes como en su ministerio. Con su extensa experiencia en el acompañamiento de religiosos y sacerdotes, subrayó cómo un acompañamiento adecuado permite el crecimiento integral en el encuentro con el Señor.
.
Destacó cuatro carencias que a menudo afectan la vida espiritual de los presbíteros: el exceso de trabajo o la inactividad, las dificultades en la comunicación, el equilibrio entre interioridad y exterioridad, y los retos inherentes a la vivencia del celibato. Como respuesta, propuso algunas claves preventivas, como una espiritualidad sosegada, acompañada, y profundamente interior.
.
Además, explicó que el acompañamiento espiritual es un proceso de diálogo y discernimiento que busca ayudar al sacerdote a conocerse mejor, aceptar sus limitaciones y fortalecerse en su vocación. Este acompañamiento puede abordarse desde distintas perspectivas: según su frecuencia, su enfoque temático o su orientación hacia el crecimiento personal y espiritual. Asimismo, resaltó la importancia de cuidar las dimensiones humana, social, espiritual y pastoral.
.
También hubo ejemplos prácticos sobre cómo integrar el acompañamiento en la vida cotidiana. El ponente subrayó que, más allá de resolver problemas concretos, este proceso busca la transformación en Cristo y una mayor eficacia espiritual y pastoral.
.
Monseñor Manuel Sánchez Monge, Obispo Emérito de Santander, y autor del libro “Aprender el arte de acompañar”, se unió a la jornada por la tarde para abordar más aspectos relacionados con la misión pastoral y el acompañamiento espiritual. La jornada concluyó alrededor de las 17:00 horas, con una mayor comprensión del rol del acompañante espiritual y su importancia en la vida de la Iglesia.
El Obispo de Segorbe-Castellón, D. Casimiro López Llorente, ha convocado a los sacerdotes y diáconos de la Diócesis a participar en la Jornada de Formación Permanente, que se celebrará el próximo lunes 27 de enero en el Seminario Diocesano Mater Dei. Este encuentro tiene como objetivo profundizar en la importancia del acompañamiento, tanto para los pastores como para los fieles, en sintonía con el Jubileo de la Esperanza que celebramos este año.
En su carta de convocatoria, D. Casimiro subraya la necesidad de “ser acompañados” en el ministerio sacerdotal para mantener viva la luz de la gracia y fortalecer la misión de acompañar a los fieles en sus caminos de fe. Según explica, el Papa Francisco invita especialmente a cultivar la amistad y el apoyo mutuo entre los sacerdotes, algo imprescindible para afrontar los desafíos de la vida pastoral.
La jornada contará con la presencia del P. Adrián López Galindo, sj, director del Máster en Discernimiento Vocacional y Acompañamiento Espiritual desde 1993, y de Mons. Manuel Sánchez Monge, obispo emérito de Santander, autor del libro “Aprender el arte de acompañar”. Ambos ponentes abordarán temas como la necesidad de los pastores de recibir acompañamiento y las claves para guiar espiritualmente a jóvenes y matrimonios.
El encuentro comenzará a las 9:30 horas con un momento de acogida y café, seguido de las conferencias, que se extenderán hasta las 14:00 horas. Tras la comida, se retomarán las sesiones para concluir alrededor de las 17:00 horas. El Obispo ha animado a todos los convocados a priorizar este día, destacando la importancia de crecer juntos en santidad y en el arte de acompañar.
Ayer, domingo día 9 de junio, la parroquia de San Miguel Arcángel de Castellón acogió una celebración, organizada por la Delegación diocesana para la Pastoral Vocacional, en la que los tres diáconos que serán ordenados este mes dieron su testimonio sobre la vocación y sobre cómo, gracias a ella, han visto en sus vidas el amor de Dios.
.
.
Se trata de Álvaro González, formado en el Seminario diocesano Mater Dei; y Pablo Durán y José Salas, formados en el Seminario diocesano y misionero Redemptoris Mater; que recibirán el sacramento del orden sacerdotal en una ceremonia presidida por monseñor Casimiro López en la Santa Iglesia Concatedral de Santa María, Castellón, el día 22 de junio a las 11:00 h.
.
.
El evento fue presentado por el Delegado diocesano para la Pastoral Vocacional, D. Ion Solozábal, y comenzó con la oración de las Vísperas y una catequesis que dio el párroco, D. Joaquín Tejedo, sobre la corona mistérica que hay en el ábside, y que gira en torno a los misterios de la vida de Cristo.
.
.
Los que pudieron asistir tuvieron una oportunidad única y preciosa de escuchar las experiencias vocacionales de estos jóvenes diáconos, en las que se pudo constatar que, en un tiempo en el que parece que la voz de Dios parece haberse perdido, se sigue escuchando con fuerza.
“En mi vida ha parecido poco a poco el amor de Dios y me he sentido muy querido – concluyó su experiencia José Salas – El Señor lo hace todo nuevo, y estoy contentísimo”. Y animó a aquellos que tienen “alguna inclinación en el corazón y piensan que a lo mejor Dios les llama, que pongan esa inquietud a los pies de la Iglesia, porque Dios no defrauda”.
.
.
Pablo Durán explicó que “el tiempo del Seminario ha sido un tiempo duro y largo en el que me he conocido, me han corregido y en el que el Señor me ha enseñado muchas cosas, a rezar, a tener intimidad con Él, a poder vivir con otros”. “Dios ha tenido mucha misericordia de mí y me ha dado una lección profunda de amor – concluyó- estoy muy contento y muy agradecido con la elección del Señor”, porque “no ha tenido en cuenta mis pecados y se ha fijado en mí, me ha demostrado que, a pesar de ser un desastre y de mi debilidad, Él me quiere y se hace fuerte”. Y animó a los jóvenes a levantar la mirada al cielo, “pídele al Señor que te conceda ver el amor que te tiene y conocer la vocación a la que te llama”.
.
.
“Dios me ha prometido la vida eterna, y aquí en la tierra el ciento por uno – indicó Álvaro González – y eso en mi vida se está cumpliendo y por ello le doy muchas gracias”. “Yo solo puedo deciros que confiéis en Dios – dijo – porque igual que a mí me está haciendo muy feliz, y hoy doy testimonio de ello, con vosotros también quiere hacer lo mismo. Dejadle entrar en vuestra vida”.
La Diócesis de Segorbe-Castellón tiene una cita importantísima el día 22 de junio a las 11:00 horas. Álvaro González, formado en el Seminario diocesano Mater Dei; y Pablo Durán y José Salas, formados en el Seminario diocesano Redemptoris Mater; recibirán el sacramento del orden sacerdotal en una ceremonia presidida por monseñor Casimiro López en la Santa Iglesia Concatedral de Santa María, en Castellón.
“Vocación, ¿te suena?”
Por ello, la Delegación diocesana para la Pastoral Vocacional ha organizado una celebración, en la parroquia de San Miguel Arcángel de Castellón, en la que los tres diáconos darán su testimonio sobre la vocación y sobre cómo, gracias a ella, han visto en sus vidas el amor de Dios. Será el próximo domingo día 9 de junio a las 18:00 h., y comenzará con la oración de las Vísperas y una catequesis. Concluirá con un ágape.
¡Te esperamos!
Desde la Pastoral Vocacional realizan una invitación a quienes estén interesados en conocer más sobre la vocación sacerdotal, en especial a todos los jóvenes de la Diócesis, ya que se trata de una oportunidad única para escuchar los testimonios inspiradores de estos jóvenes diáconos y para reflexionar sobre la llamada de Dios en nuestras propias vidas.
Con el inicio del mes de diciembre se renuevan las intenciones de oración que propone el Papa Francisco y la Conferencia Episcopal Española. El Papa dirige su intención para la evangelización por los catequistas: “Recemos por los catequistas, llamados a proclamar la Palabra de Dios: para que sean testigos de ella con valentía, creatividad y con la fuerza del Espíritu Santo”.
“¡Sed catequistas!, no trabajéis de catequistas: ¡esto no sirve! Yo trabajo de catequista porque me gusta enseñar. Pero si no eres un catequista, no sirve. ¡No serás fecundo, no serás fecunda! Ser catequista es una vocación: ser catequista, esta es la vocación, no trabajar de catequista. Prestad atención, no he dicho hacer de catequista, sino serlo, porque involucra la vida. Lleva al encuentro con Jesús con las palabras y con la vida, con el testimonio”.
“A menudo pienso en el catequista como aquel que se ha puesto al servicio de la Palabra de Dios, que frecuenta esta Palabra diariamente para hacer de ella su alimento y participarla con los demás con eficacia y credibilidad. El catequista sabe que esta Palabra está viva (Hb 4:12) porque constituye la regla de la fe de la Iglesia (cf. Conc. Ecum. Vat. II, Dei Verbum, 21; Lumen Gentium, 15). En consecuencia, el catequista no puede olvidar, especialmente hoy en un contexto de indiferencia religiosa, que su palabra es siempre un primer anuncio. Pensadlo bien: en este mundo, en esta área de tanta indiferencia, vuestra palabra siempre será un primer anuncio, que llega a tocar el corazón y la mente de muchas personas que están a la espera de encontrar a Cristo. Incluso sin saberlo, pero lo están esperando. Y cuando digo el primer anuncio no lo digo solo en el sentido temporal. Por supuesto, esto es importante, pero no siempre es así. ¡El primer anuncio equivale a subrayar que Jesucristo muerto y resucitado por el amor del Padre, da su perdón a todos sin distinción de personas, si tan solo abren sus corazones para dejarse convertir! A menudo no percibimos el poder de la gracia que, a través de nuestras palabras, llega profundamente a nuestros interlocutores y los moldea para que puedan descubrir el amor de Dios. El catequista no es un maestro o un profesor que cree que da una lección. La catequesis no es una lección; la catequesis es la comunicación de una experiencia y el testimonio de una fe que enciende los corazones, porque introduce el deseo de encontrar a Cristo. ¡Este anuncio de varias maneras y con diferentes idiomas es siempre el “primero” que el catequista está llamado a dar!”.
Por otra parte, la intención de oración de la Conferencia Episcopal Española (CEE), por la que también reza la Red Mundial de Oración del Papa, es “por los sacerdotes y diáconos, para que vivan siempre en fidelidad a la vocación recibida, y vean confortada su entrega a Dios y a la Iglesia por el amor y respeto de sus fieles”.
Nuestro Obispo, D. Casimiro, en su carta del 5 de diciembre de 2020, nos decía que “para seguir las huellas del Buen Pastor, la vocación de pastor pide una entrega total, una entrega de amor, que compromete toda la vida. Puede que hablar de una entrega total de sí mismo y para siempre, resulte hoy especialmente difícil. Pero, es preciso ser claros y fieles al modo como Jesús y la Iglesia nos enseña a recibir esta vocación sacerdotal. En el desarrollo y la maduración de la vida cristiana de niños, jóvenes y adultos, hay etapas y altibajos, pero lo importante es saber orientar un camino que, confiando en la gracia del Señor, mira siempre a una entrega más grande y total”.
El pasado día 16 de mayo, tres seminaristas del Seminario Diocesano Internacional y Misionero “Redemptoris Mater”recibieron el Orden del Diaconado. Se trataba de David Vázquez, que tiene 27 años y es natural de Morón de la Frontera (Sevilla); de Wilson González, tiene 31 años y es de Santo Domingo (República Dominicana); y de Jae Kang Albino Hong, tiene 37 años y es de Corea del Sur. Comenzaron así una vida de servicio al Señor y a la Iglesia siendo servidores de la caridad, de la Palabra de Dios y de la Eucaristía.
Ordenación Diaconal
Mañana, día 9 de octubre a las 11:00 horas, nuestro Obispo, D. Casimiro, les administrará el sagrado Orden del Presbiterado en la S. I. Concatedral de Santa María, Castellón. Será una ceremonia cargada de emoción, y estarán acompañados de familiares, de hermanos de comunidad y de amigos, en un día que quedará grabado en la memoria de estos tres jóvenes que, a partir de mañana, en comunión con el Obispo y con la gracia de Dios, harán presente a Jesucristo sirviendo a la Iglesia, cumpliendo con la misión de ser sal de la tierra y luz del mundo entre las gentes de la Diócesis, y anunciando el Evangelio como ministros de los sacramentos y de la Eucaristía.
Estas ordenaciones sacerdotales podrán seguirse en directo por el canal diocesano en Youtube (Diócesis Segorbe-Castellón). En el siguiente enlace:
Entrevista a David Vázquez, Wilson González y Albino Hong
¿Cómo afrontáis este momento tan importante?, ¿quiénes os acompañarán?
David: Yo lo intento afrontar desde la oración. Porque en este tiempo de preparación de la ordenación es muy fácil distraerse con los preparativos y los quehaceres del día a día. Y creo que es fundamental tener más momentos de intimidad con el Señor, por eso hemos organizado alguna vigilia, retiro etc. Y también creo que es importante afrontarlo con humildad, sabiendo quién soy, siendo consciente de mis debilidades y pobrezas, para que así pueda aparecer la gracia de Dios, que es quien lleva a cabo la misión. Como dice san Pablo: “la fuerza se realiza en la debilidad”. Gracias a Dios me podrán acompañar mis familiares y amigos de Morón que, con esto de la pandemia, estaba más en el aire. Y también mi comunidad y parroquia en la que he vivido la fe estos años de Seminario.
Wilson: Con mi fuerza no, sino con la ayuda de Dios. Esto lo digo, porque viéndome a mí, que soy una persona débil que le cuesta hacer la voluntad de Dios, puedo decir que esto lo estoy afrontando con la ayuda de Dios, concretamente con la oración y con los sacramentos. Me acompañaran mis padres, mis hermanos de comunidad de Santo Domingo, mis hermanos de comunidad de Castellón, el Obispo, los presbíteros, el seminario, mis amigos y los feligreses de la parroquia de Nules. Para mí es importante que todas estas personas me acompañen en el momento más importante de mi vida, porque ahí se ve la comunión de los santos y la comunión de la Diócesis de Segorbe-Castellón.
Albino: Estoy muy bien, y muy contento. En este momento primero me acompaña el Señor, me ayuda y me anima para seguir su voluntad. Y me acompaña D. Manolo Agorreta, párroco de Nules, y Wilson González, el diácono que está conmigo en esta parroquia, con mucho amor y paciencia. También los fieles de Nules me acogen con mucho cariño y me ayudan a aprender sobre el amor.
Es largo el recorrido realizado para llegar al sacerdocio. ¿Cómo habéis vivido las diferentes etapas formativas, en el Seminario?
David: En mi caso han sido 10 años, pero creo que han sido necesarios. Y si lo miras bien no son tantos años para lo que vas a realizar después. Yo he vivido las etapas formativas como un regalo, porque he ido viendo la actuación de Dios en mi vida, y tengo la experiencia de que el Señor me ha ido sanando y preparando para la misión que me quiere dar. De todos estos años la conclusión que saco es que Dios siempre te da lo que necesitas.
Wilson: La verdad que, para mí, el tiempo de formación en el seminario fue y es una ayuda, porque gracias a la formación que recibí puedo decir que Dios tiene poder de sacar a una persona de la muerte y llevarlo a su Iglesia; eso es lo que ha hecho el Señor conmigo. El tiempo del seminario lo he vivido como una gracia.
Albino: Antes del tiempo del seminario yo era un chulo, un orgulloso y un gran soberbio. Pero no me conocía mucho. Por el tiempo del Seminario, el Señor me iluminó a conocerme, me bajó en la realidad y me ayudó a entender toda mi historia desde su amor. Ahora ya sé que soy soberbio y no soy nada, pero el Señor siempre me acompaña para vivir en la vida. Todo lo lleva Él, es lo mejor para mi salvación. También sé que soy incapaz de ser un pastor, hay dificultades, el idioma por ejemplo, por eso siempre le pido al Señor que me acompañe, que me mande el Espíritu Santo, que abra mi boca y mueva mi corazón. Y la oración me anima mucho a seguir la Voluntad de Dios, me ayuda a hacer las cosas por amor a Dios.
En este tiempo habéis recibido vuestro primer destinado pastoral, ¿dónde estáis?, ¿qué balance hacéis de este tiempo?
David: Mi destino es Benicàssim, donde llevo varias semanas viviendo. Ya he empezado a conocer los distintos grupos, catequistas, feligreses etc. Y veo que el trato que me dan es muy bueno, sobretodo del párroco y del vicario, que me están cuidando y ayudando mucho. Aun me tengo que asentar y conocer mejor a la gente, pero estoy contento.
David Vázquez
Wilson: Estoy en la parroquia de San Bartolomé y San Jaime de Nules. Mi experiencia es la siguiente: estar en una parroquia es para mí algo nuevo, porque es la primera vez que estoy en una parroquia ya no como seminarista sino como diácono, y luego como presbítero. Esto para mí es un regalo porque me ayuda a salir de mi mismo. La verdad, estoy muy contento por esta misión que Dios me ha dado.
Wilson González
Albino: Estoy en la parroquia San Bartolomé y San Jaime de Nules. Allí estoy aprendiendo las cosas de la parroquia, conociendo a la gente de Nules, sirviendo a la Iglesia.
Albino Hong
En el 2019, en un encuentro que tuvo el Papa Francisco con los seminaristas de Bolonia, decía que el sacerdocio no es una carrera profesional, sino una vocación de servicio. ¿A qué o a quién queréis servir en vuestro ministerio?
David: En mi ministerio quiero servir a la Iglesia y a toda la gente que el Señor me ponga delante. La vocación al sacerdocio no es una carrera profesional, pues sin una llamada de Dios no puedes entrar en ese servicio. Porque con la vocación puedes confiar en la gracia y te nacerá de forma automática el ponerte al servicio.
Wilson: Partiendo de mi experiencia, puedo decir con toda sinceridad que Dios me ha elegido para servirle a Él a través de los feligreses de la parroquia. Yo quiero servir a Cristo, porque ha sido Él quien me ha salvado y me ha sacado de la muerte en la que estaba metido.
Albino: El sacerdote no es un líder de la Iglesia y de la parroquia, sino que es un servidor de la Iglesia en el Señor. Hay que servir a la Iglesia, a la parroquia, al Papa y al Obispo, al Pueblo de Dios. Es escuchar a la gente y los que sufren, acompañarles, anunciar la Buena Noticia de que Jesucristo ha resucitado, anunciar la Resurrección y la salvación de los hombres. No es porque habla bien, porque es inteligente, porque sabe mucho, porque es santo, sino que es un servidor que está para servir al Señor y seguir la voluntad de Dios, para servir a la Iglesia, al Pueblo de Dios y para servir a todos los hombres para que se acerquen y conozcan al Señor.
¿Tenéis ya fecha para vuestras primeras misas?
David: Si, mi primera Misa será el 10 de octubre por la tarde en la parroquia de Ntra. Sra. de la Merced de Burriana, que es la parroquia donde he vivido la fe con mi comunidad los 7 últimos años de Seminario.
Wilson: Sí. Mi primera Misa será el 10 de octubre en la parroquia de Santo Tomás de Villanueva de Castellón, a las 12h del medio día, y luego el 11 de octubre haré una primera Misa en Nules, a las 19 h.
Albino: Sí. Voy a celebrar mi primera Misa el día 10 de octubre a las 13:00 h. en el convento de Nules.
César Igual, Jesús Chávez y Jon Solozabal, nuevos diáconos en vistas al sacerdocio
El sábado 7 de diciembre, víspera de la Inmaculada, Mons. Casimiro López Llorente ordenará diáconos a los seminaristas César Igual, Jesús Chávez y Jon Solozábal, como paso previo al presbiterado. La ceremonia será en la Concatedral de Santa María de Castellón a las 12h. Previamente, el jueves 5 han participado en una vigilia de oración vocacional y testimonial en la parroquia de la Santísima Trinidad, en Castellón. Demos gracias a Dios por este regalo y oremos por estos nuevos servidores del Pueblo de Dios en Segorbe-Castellón.
– ¿Cómo reconocisteis la llamada de Dios al sacerdocio?
César Igual (CI). Creo que la llamada la recibí en la adolescencia, pero no la atendí e hice mi vida por mi cuenta. Esa autonomía me llevó a una falta de sentido e insatisfacción existencial. Entonces reconocí aquella llamada de la adolescencia e inicié un camino de conversión.La llamada al sacerdocio la recibí comprendiendo y siguiendo la providencia divina.
– Jesús Chávez (JC). Hubo dos momentos. El primero fue durante una convivencia de inicio de curso del Camino Neocatecumenal en la que se habló sobre la vocación. Los catequistas decían que el Señor te puede llamar a un noviazgo cristiano en vistas a una familia cristiano, a la vida consagrada o al sacerdocio, y aseguraban que la felicidad está en hacer la voluntad de Dios. A partir de ese momento comencé a pedir al Señor que me iluminara cuál era su voluntad, y que si era que me fuera al seminario, que me diera la fuerza de decirle que sí. Unos meses después asistí a un encuentro vocacional centro americano en El Salvador. Después de la predicación, en la que se hizo referencia al pasaje de la carta a los Corintios en la que se dice que no vivamos para nosotros mismo, sino para el Señor, vi que Dios me estaba llamando a vivir para Él. En ese momento no lo sabía, pero había estado todo el tiempo viviendo para mí. Allí es donde siento la llamada. Con el tiempo he podido reconocerla gracias a un proceso de discernimiento vocacional en el Seminario y a través de la Iglesia.
– Jon Solozabal (JS). La primera vez que sentí la llamada fue durante la Jornada Muncial de la Juventud de Sydney en 2008 con Benedicto XVI. En aquella época me encontraba en una situación de crisis existencial. Tenía 17 años y no entendía mi vida. Estaba en rebeldía conmigo mismo, con mi historia, no aceptaba a mi familia, y había fracasado en todo. Había abandonado los estudios y estaba trabajando. Aunque seguía en la Iglesia y tenía mi comunidad, llevaba una vida pagana. Y a través de esa peregrinación vi que Dios me llamaba a cambiar de vida. Concretamente fue en el encuentro vocacional al final de la peregrinación, con los iniciadores del Camino Neocatecumenal, en el que el Señor tocó mi corazón por el anuncio del kerygma con una catequesis sobre Zaqueo, en la que yo me vi muy reflejado en la pobreza de este recaudador de impuestos. Cuando Kiko Argüello pidió vocaciones para el presbiterado, me levanté. Mejor dicho: el Señor me levantó, porque yo estaba totalmente incapacitado para levantarme. Un año después entré en el Seminario. Esa llamada se ha confirmado en mi vida gracias a la ayuda y el discernimiento de la Iglesia durante 10 años de formación.
Los centros académicos diocesanos, el Superior de Estudios Teológicos (CSET) Mater Dei y el Instituto Diocesano de Ciencias Religiosas (IDCCRR), están al servicio de la misión. Lo afirma Mons. Casimiro López Llorente, argumentando que “el cristiano se ha de formar para ser misionero”. El Obispo concluía el acto de apertura del curso – el miércoles 18, fiesta de San Lucas – exhortando a dar a conocer la “vida académica que lleva la Diócesis”. Este año se forman medio centenar de personas entre seminaristas, candidatos al diaconado permanente y seglares.
Esta mañana Mons. Casimiro López ha ordenado a dos nuevos diáconos: David Escoín Rubio y Francisco Javier Phuc Pham Van, de los seminarios Mater Dei y Redemptoris Mater respectivamente. En la celebración, que ha tenido lugar en la parroquia de la Asunción de Onda, han participado unas 600 personas y medio centenar de sacerdotes, que han concelebrado junto al Obispo.
David es de Castellón y en él se fue fraguando la llamada de Dios tras el trágico accidente de su hermana, del cual se sirvió el Señor para plantar su vocación”. Ahora Escoín quiere “agradecer a Dios todo lo que ha hecho en su vida, ponerse al servicio de la Iglesia y llevar su Palabra al mundo”, por eso hoy le dice sí al Señor como diácono y más adelante lo hará como sacerdote para toda la vida.
Francisco Javier Phuc es de Ninh Binh (Vietnam). Él comenzó a ver que Dios le llamaba al sacerdocio ya de niño, cuando era monaguillo en su pueblo natal, en su parroquia viendo el fiel testimonio de su párroco y de los sacerdotes de su pueblo. Para entrar al seminario en Vietnam Phuc necesitaba el permiso del gobierno, lo cual complicó mucho las cosas. Hace 11 años el joven, del Camino Neocatecumenal, llegaba al Redemptoris Mater de Castellón y hoy lo tiene muy claro: “Quiero ser sacerdote porque quiero corresponder a la llamada que Dios me regala por puro amor y misericordia. Su Santo Espíritu me urgió en mi corazón a sentirme querido por Él y luego apareció en mí un deseo de continuar la misión de Cristo dando testimonio de su amor”, afirma el joven diácono.
“¡Damos gracias a Dios por el don de vuestra ordenación, que hoy es un bien para todos!”, ha exclamado el Obispo hoy en la celebración. Mons. Casimiro López ha insistido: “sois motivo de alegría, de esperanza de ver que la semilla del sacerdocio sigue siendo acogida en corazones jóvenes para que el anuncio de Jesucristo siga llegando a todos”.
El prelado les ha alentado a “ser hombres de bien, llenos del Espíritu Santo hasta el último momento de vuestras vidas, para que mucha gente se acerque a Jesucristo”.
“Es vuestra labor como diáconos la proclamación de la Palabra. Estáis llamados a ser mensajeros y a hacer viva la Palabra de Dios”. En este sentido Mons. López Llorente les ha advertido del peligro de desvirtuar el mensaje de Jesucristo: “No olvidéis nunca que es la Palabra de Dios, no es nuestra palabra, ni vuestra palabra. Tampoco es una palabra que se impone, sino que se propone y se ofrece”.
Esta web utiliza 'cookies' propias y de terceros para ofrecerte una mejor experiencia y servicio. Pulsando en "aceptar" consientes el uso de todas las cookies, pero puedes cambiar la configuración de 'cookies' en cualquier momento.
Como la mayoría de los servicios en línea, nuestro sitio web utiliza cookies propias y de terceros para varios propósitos. Las cookies de origen son principalmente necesarias para que el sitio web funcione correctamente y no recopilan ninguno de sus datos de identificación personal.
Las cookies de terceros utilizadas en nuestros sitios web se utilizan principalmente para comprender cómo funciona el sitio web, cómo interactúa con nuestro sitio web, mantener nuestros servicios seguros, proporcionar anuncios que sean relevantes para usted y, en general, brindarle una mejor y mejor experiencia del usuario y ayudar a acelerar sus interacciones futuras con nuestro sitio web.
Cookies Necesarias
Algunas cookies son esenciales para que pueda experimentar la funcionalidad completa de nuestro sitio. Nos permiten mantener las sesiones de los usuarios y prevenir cualquier amenaza a la seguridad. No recopilan ni almacenan ninguna información personal. Por ejemplo, estas cookies le permiten iniciar sesión en su cuenta y agregar productos a su carrito y pagar de forma segura.
Respetamos completamente si desea rechazar las cookies, pero para evitar preguntarle una y otra vez, permítanos almacenar una cookie para eso. Puede optar por no participar en cualquier momento u optar por otras cookies para obtener una mejor experiencia. Si rechaza las cookies, eliminaremos todas las cookies establecidas en nuestro dominio.
Le proporcionamos una lista de las cookies almacenadas en su computadora en nuestro dominio para que pueda verificar lo que almacenamos. Por razones de seguridad, no podemos mostrar ni modificar cookies de otros dominios. Puede comprobarlos en la configuración de seguridad de su navegador.
Cookies para Google Analytics
Estas cookies almacenan información como el número de visitantes al sitio web, el número de visitantes únicos, qué páginas del sitio web se han visitado, la fuente de la visita, etc. Estos datos nos ayudan a comprender y analizar qué tan bien funciona el sitio web y donde necesita mejorar.
Si no desea que rastreemos su visita a nuestro sitio, puede deshabilitar el rastreo en su navegador aquí:
Otros servicios externos
También utilizamos diferentes servicios externos como Google Webfonts, Google Maps y proveedores de video externos. Dado que estos proveedores pueden recopilar datos personales como su dirección IP, le permitimos bloquearlos aquí. Tenga en cuenta que esto podría reducir considerablemente la funcionalidad y la apariencia de nuestro sitio. Los cambios entrarán en vigor una vez que vuelva a cargar la página.
Google Webfont:
Google Maps:
Google reCaptcha:
Vimeo and Youtube videosembeds:
Política de Privacidad
Puede leer sobre nuestras cookies y la configuración de privacidad en detalle en nuestra Página de Política de Privacidad.