El próximo sábado 2 de febrero se celebra el Encuentro Diocesano de Apostolado Seglar en el Seminario «Mater Dei» de la capital de La Plana, que ha sido convocado por el Obispo de la Diócesis de Segorbe-Castellón, Monseñor López Llorente, como preparación del Congreso Nacional del Laicado, que tendrá lugar en Madrid en 2020.
El programa de esta fase precongresual comenzará a las 10:00 horas con la acogida de los participantes y la entrega de documentación para las sesiones. A continuación, sobre las 10:30, se rezará una oración, se saludará a los presentes y se presentará el encuentro. A las 11:00 horas está prevista la ponencia «Laicos: Discípulos-misioneros», que pronunciará Monseñor Salinas Viñals, obispo auxiliar de Valencia y presidente de la Comisión Episcopal del Apostolado Seglar (CEAS) de la Conferencia Episcopal Española.
Seguidamente, a las 12:30, se celebrará el plenario del Encuentro Diocesano de Apostolado Seglar, en el que se escuchará a los laicos de la diócesis, se hablará de los distintos caminos de santidad y se plantearán los primeros objetivos de cara al mencionado congreso que tendrá lugar en la capital de España el año que viene. La jornada finalizará con información de la Delegación de Apostolado Seglar de nuestra diócesis y una comida de hermandad.
Francisco Pérez, delegado diocesano de Apostolado Seglar de la diócesis de Segorbe-Castellón, ha manifestado que el encuentro del próximo sábado 2 de febrero «es un momento de comunión de toda la iglesia diocesana» y -como nos ha recordado nuestro Obispo en su carta pastoral ‘Es la hora de los laicos’- «también de oración y de reflexión sobre la responsabilidad y tareas de los laicos en la misión en la Iglesia y, de modo particular en lo que les es específico, en el mundo». Esperamos que haya buena acogida y que sea un momento de «nuevo aliento para el laicado de nuestra diócesis con miras también al congreso que se celebrará en Madrid en 2020», ha concluido.
El encuentro de Apostolado Seglar es una invitación de Monseñor López Llorente «a todo el Pueblo de Dios de Segorbe-Castellón; vale pues para todos: laicos, consagrados, diáconos permanentes y sacerdotes. Vale, en primer lugar, para todos los laicos –hombres y mujeres-, especialmente para los jóvenes, estéis asociados o no; vale para los miembros de movimientos apostólicos y nuevos movimientos, de cofradías y hermandades y de otras realidades eclesiales, incluidas las que no se consideran movimientos; y, vale, por supuesto, para catequistas, profesores de religión, profesores cristianos, visitadores de enfermos, voluntarios de Cáritas, monitores de tiempo libre, etc. Que nadie se sienta excluido».