El Obispo de la Diócesis nos exhorta a «abrir nuestro corazón al Espíritu Santo para caminar juntos en el proceso sinodal»
Esta mañana, en la celebración litúrgica de Apertura de la fase diocesana del Sínodo de los Obispos
Este mediodía ha tenido lugar, en la S.I. Concatedral de Santa María, en Castellón, la celebración litúrgica de apertura del proceso sinodal en la Diócesis de Segorbe-Castellón al que estamos convocados todo el Pueblo de Dios. Presidida por nuestro Obispo, D. Casimiro López Llorente, y concelebrada por D. Miguel Simón, Deán de la Concatedral y párroco de Santa María; y por D. Javier Aparici, Vicario General, acompañados por una nutrida representación de los sacerdotes de nuestra Diócesisis, asistidos por los seminaristas de los Seminarios Mater Dei y Redemptoris Mater.
Con la celebración de hoy, nuestra Diócesis entra de lleno en este importante proceso en el que la Iglesia diocesana de Segorbe-Castellón se ha unido a través de la Solemne Eucaristía a partir de la cual, se nos invita a participar en la sinodalidad que, en palabras del Santo Padre como ha recordado hoy nuestro Obispo, «es el camino que Dios espera de la Iglesia de hoy y ahora».
El libro de los Evangelios, que ha sido entronizado en el Altar Mayor, ha precedido la procesión de entrada mientras se cantaba Pueblo de Reyes, interpretada al órgano por Augusto Belau, organista titular de la Concatedral Santa María, dando comienzo la celebración litúrgica en la que hoy se ha enfatizado la importancia del Espíritu Santo, el papel central de Pentecostés en la vida de la Iglesia y el aspecto pneumatológico del proceso sinodal.
Liturgia de la Palabra
Con la lectura del Libro de los Hechos (Hch 2, 1-11) hemos recordado como los Apóstoles «se llenaron todos de Espíritu Santo» cumpliéndose así lo que les había prometido el Señor. También, en el Salmo (32), se ha elogiado a «la nación cuyo Dios es el Señor (…) pueblo que él escogió como heredad», mirándonos desde el cielo y fijándose en cada uno de los que formamos la Iglesia diocesana de Segorbe-Castellón. Ha precedido al Evangelio, la lectura de la Carta de San Pablo (1 Cor 12, 12-26) a través de la cual apreciamos cómo somos miembros de un mismo cuerpo «y todos los miembros del cuerpo a pesar de ser muchos, son un solo cuerpo, y así es también Cristo».
El Evangelio proclamado (Mt 28, 16-21) ha venido a acentuar la misión que se nos encomienda como Pueblo de Dios en esta fase diocesana del Sínodo, pues todos los bautizados somos discípulos y, por tanto, piedras vivas en la construcción del Cuerpo de Cristo.
A partir de las lecturas proclamadas, la homilía del Obispo de nuestra Diócesis ha subrayado precisamente los elementos clave del Sínodo de los Obispos en el que se nos invita a la comunión y la participación para ir juntos a la misión. La sinodalidad, ha dicho D. Casimiro, «nos llama a todos los miembros de nuestra Iglesia diocesana a implicarnos en este proceso sinodal, proceso de oración y reflexión para caminar juntos, en la escucha del Espíritu Santo y de la Palabra de Dios, para participar así en la misión de la Iglesia desde la comunión que Cristo establece entre nosotros». En este sentido, ha puesto el acento en el Evangelio de San Marcos, pues todos estamos llamados, en virtud de nuestro Bautismo, a participar activamente en la vida y misión de la Iglesia, y estamos convocados a participar en este proceso sinodal inscribiéndonos y participando en los grupos de oración y reflexión que se van a crear con este fin».
Parroquias, pequeñas comunidades cristianas, movimientos de laicos, comunidades religiosas y grupos eclesiales, todos, ha insistido el Obispo, «mujeres y hombres, jóvenes y ancianos, todos estamos invitados a escucharnos unos a otros, para oír los impulsos del Espíritu Santo, que guía nuestros esfuerzos, da vida y vitalidad a nuestra Iglesia y nos lleva a una comunión más profunda para salir a nuestra misión en el mundo».
En este proceso de escucha y diálogo, debemos participar y hacerlo «con humildad y caridad, con autenticidad y verdad para convertirnos en la Iglesia que Dios nos llama a ser», ha continuado el Obispo, dejándonos llevar por el Espíritu Santo al discernimiento «a partir de la lectura orante de la Palabra de Dios, nos escucharemos unos a otros, escucharemos nuestra tradición de fe y los signos de los tiempos, para discernir lo que Dios nos dice a todos».
Adsumus Sancte Spiritus: Oración del Sínodo
La oración que va a acompañarnos durante la fase diocesana del proceso sinodal, atribuida a San Isidoro de Sevilla, se ha utilizado tradicionalmente en concilios y sínodos durante cientos de años. La versión que se adjunta, y que esta mañana se ha repartido a los fieles, está diseñada específicamente para el camino sinodal de la Iglesia de 2021 a 2023.
Estamos ante ti, Espíritu Santo,
reunidos en tu nombre.
Tú, que eres nuestro verdadero consejero:
ven a nosotros,
apóyanos,
entra en nuestros corazones.
Ensénanos el camino,
muéstranos cómo alcanzar la meta.
Impide que perdamos el rumbo
como personas débiles y pecadoras.
No permitas que
la ignorancia nos lleve por falsos caminos.
Concédenos el don del discernimiento,
para que no dejemos que nuestras acciones se guíen
por prejuicios y falsas consideraciones.
Condúcenos a la unidad en ti,
para que no nos desviemos del camino
de la verdad y la justicia,
sino que en nuestro peregrinaje terrenal nos esforcemos
por alcanzar la vida eterna.
Esto te lo pedimos a ti,
que obras en todo tiempo y lugar,
en comunión con el Padre y el Hijo
por los siglos de los siglos. Amén.
Reflexion diocesana
En el caso de nuestra Diócesis, esta fase del Sínodo de los Obispos se va a llevar a cabo de forma armónica junto a una Reflexión Diocesana a partir de la cual se nos indicarán las prioridades y nos mostrará el camino por el que debemos ir. Dicha Reflexión se realizará en base a un calendario que se inicia ya en este mes de octubre y se prolongará hasta febrero próximo. Será en marzo del próximo año cuando se reunirá el Consejo Presbiteral y el Consejo Diocesano de Pastoral para la redacción de la aportación diocesana, que se enviará después a la Conferencia Episcopal. Los obispos españoles tendrán un periodo de discernimiento, escuchando aquello que el Espíritu ha suscitado, al que seguirá la redacción de una síntesis que se enviará a Roma, donde la Secretaría General del Sínodo procederá a la redacción del primer documento de trabajo, el Instrumentum Laboris, antes de septiembre de 2022.
Tras la Eucaristía D. Casimiro ha entregado personalmente, a algunos representantes de nuestra Iglesia diocesana, la Reflexión Diocesana y la Carta Pastoral que ha dirigido al Pueblo de Dios con motivo del Año Jubilar que vamos a celebrar este año que se conmemora el 775 Aniversario de la Sede Episcopal en Segorbe. A continuación se ha entonado el Salve Regina concluyendo la ceremonia con la procesión de salida cuya imagen refleja, precisamente, a lo que hoy nos ha llamado nuestro Obispo, «a caminar juntos para salir en misión».