El Misterio de la Navidad se hace presente en Llucena a través de la representación del belén viviente

Los más pequeños del municipio fueron ayer los protagonistas de la cuarta edición del belén viviente de Llucena, organizado desde la parroquia, que congregó a más de cuatrocientas personas.

Los niños interpretaron a los personajes del Nacimiento del niño Jesús, que narra el Nuevo Testamento. Diferentes escenas como la de los Ángeles anunciando la historia de la Salvación, la Anunciación y la Visitación, el edicto del César, el camino a Belén, el nacimiento de Jesús, el anuncio a los pastores y la adoración de los Reyes Magos fueron representadas por más de 30 niños (la mayoría de ellos en preparación para recibir la Primera Comunión).

El papel más destacado fue el del niño que interpretó a Jesús (Mateo Poenaru Mellado) que nació hace pocos meses. También hubo una escena sorpresa (la vendedora de telas de seda) interpretada por gente mayor y que puso la nota de humor a la representación.

Los animales también estuvieron presentes en las diferentes escenas: el burro que acompañó a María y a José en su camino a Belén, las cabras cuidadas por los pastores y las gallinas y conejos, cerca del pesebre donde nació el Mesías. Sin olvidar, la colaboración especial de la Rondalla Jove de Llucena que interpretó una selección de villancicos populares, acorde a las escenas, que transcurrieron por la plaza de España y por el interior del templo.

En esta ocasión se incorporaron también la Unió Musical Llucenenca que tocó varios villancicos y el grupo de sevillanas local que bailó una pieza navideña flamenca. Cabe destacar que en el belén colaboran un buen grupo de vecinos que se encargan de preparar los diferentes escenarios con utensilios tradicionales de la zona. Como novedad hubo una paraeta con “figues albardaes” para recaudar fondos para la iglesia parroquial.