Sacerdotes, curia y delegados diocesanos felicitan al Obispo la Navidad
En un acto celebrado en la Concatedral de Santa María de Castellón este mediodía el Obispo ha recibido la felicitación de Navidad por parte de los sacerdotes, curia y delegados diocesanos laicos que han trasladado a D. Casimiro el deseo de «una santa y feliz navidad en la alegría y el amor que nos trae el Niño Dios», en palabras del Vicario General, Javier Aparici.
La Navidad nos lleva a buscar a Dios «en lo humilde, en lo sencillo, en lo pequeño que es donde Él ha querido manifestarse», ha dicho el Vicario General. Con el deseo de que la contemplación de estos días y que el Misterio del Amor de Dios «nos lleve a tomar nuevamente conciencia del gran don que se nos ha dado al transmitirnos la fe, y al mismo tiempo nos haga sentir el deber y la alegría de transmitir esta experiencia a los que nos rodean» han deseado al Obispo «que el Niño-Dios llene su vida y ministerio episcopal entre nosotros de su luz y de su paz».
En una sentida y emotiva intervención D. Casimiro se ha dirigido a los presentes celebrando la buena noticia de que el Niño Dios «nació y se quedó entre nosotros y esa es la verdadera alegría de la Navidad, haciendo una constante acción de gracias a Dios, contemplando el Misterio y dejándose llenar del amor de Dios para así llevarlo a los demás y dejarse llenar de la luz y de la vida que nos trae» ha dicho el Obispo.
D. Casimiro les ha animado a no desfallecer «en nuestra tarea con los pobres, con los necesitados, con los más vulnerables que han de ser atendidos hasta el final con dignidad porque eso es lo que nos pide Dios». La Navidad es vida y «ese es el misterio que hemos de contemplar, y celebramos aquel acontecimiento sabiendo que Él nace constantemente en nosotros y entre nosotros, para darnos vida». Por ello ha alentado «a vivir y proclamar el Evangelio pero también a defender la dignidad de toda vida humana y evitar que nos ocurra como en tiempos de Jesús, que Él vino a los suyos y los suyos no le recibieron».
A pesar de las circunstancias especiales de este año por la pandemia, el Obispo ha resaltado que la «verdadera alegría es la que mana del saberse amados siempre y nunca abandonados por el amor de Dios manteniendo viva la conciencia cristiana y humana en la sociedad».
Por otra parte, esta mañana también se han acercado al Palacio Episcopal de Castellón, para felicitar a D. Casimiro, la Real Cofradía de la Mare de Déu del Lledó, Acción Católica, la Hospitalidad Diocesana Ntra. Sra. de Lourdes y Cáritas Diocesana.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!