ENTREVISTA DÍA DE LA IGLESIA DIOCESANA: «El bien con bien se paga»
Raúl Marín, feligrés de El Salvador de Castellón
Raúl Marín escoge el órgano para hacer la foto. Es el organista de la parroquia de El Salvador, en Castellón. También está coordinando desde hace unos meses la Cáritas parroquial. Su mujer, da catequesis, y su hijo mayor comienza a ayudar como voluntario, también en Cáritas. Asegura que “el bien con bien se paga”, y que como familia han recibido mucho de la Iglesia. Por eso decidieron comprometerse con una aportación mensual. Es un buen ejemplo de corresponsabilidad para el Día de la Iglesia Diocesana.
- ¿Por qué decidiste hacer una aportación mensual a la parroquia?
- Fue al inicio del confinamiento. Solíamos dar una aportación en Misa, pero desde el primer estado de alarma notamos que venía menos gente, que los gastos seguían siendo importantes y que la parroquia estaba necesitada. El párroco, Samuel Torrijo, hizo un video pidiendo ayuda y a partir de ahí nos abonamos. La que fue decisiva para tomar la decisión fue mi esposa. Ella acostumbra a hacer aportaciones a diferentes ONG’s, y al ver que dedicábamos más tiempo a Cáritas y a la parroquia, y que esa dedicación tiene sus frutos, nos hizo más responsables y decidimos colaborar. La Iglesia es como una fuente que reparte el agua, pero también es necesario cuidarla: venimos aquí y está todo preparado, tenemos un edificio que otros han hecho para nosotros y que hemos heredado hecho. El bien con bien se paga, y trabajar para la iglesia es trabajar para nosotros.