La Jornada de la Infancia Misionera reúne a 600 niños en un acto de colaboración diocesana
Después de XVI ediciones, la Jornada Diocesana de la Infancia Misionera ha dejado de ser noticia por la asistencia. Ya no es novedad porque la alta participación es una constante. El sábado pasado participaron 600 niños de diferentes poblaciones de la Diócesis, y el secreto está en la colaboración de parroquias, movimientos y congregaciones en esta iniciativa de la Delegación de Misiones. El lema del 2017 ha sido Sígueme, a partir del cual el Obispo ha invitado los niños a un encuentro con Cristo.
El día comenzó con la Misa en el salón de actos del Colegio Diocesano Mater Dei. Mons. Casimiro López Llorente introducía la celebración afirmando que esta novedad en el horario pone de manifiesto que “Jesús esté en el centro”. El Obispo insistió en dejarse encontrar por Cristo a través de su Palabra, el grupo donde están y los pobres, y de este modo “poder dar a los demás lo mejor que tenemos: la amistad con Él”.
A continuación los niños participaron en cinco talleres preparados por la parroquia de Nules, las hermanas de la Consolación de Burriana, Castellón y Vila-real, el grupo Jóvenes en Acción de la parroquia de los Santos Evangelistas de Vila-real , el Secretariado de Migraciones, Ameáfrica y los Scouts. Esta actividad estaba ambientada en diferentes lugares donde Jesús llamó a sus discípulos, y planteaba cómo responder con compromisos concretos en la familia, la amistad, la oración, el compartir, la llamada y la Eucaristía.
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