El Camino Neocatecumenal celebra con el papa su 50 aniversario
El pasado sábado 05 de mayo, el papa Francisco se reunió en Roma con los iniciadores y multitud de fieles del movimiento en Roma para celebrar el 50 aniversario de una realidad eclesial que ha dado muchísimos frutos a la Iglesia con nombres propios como la familia y la Evangelización.
Han sido más de 150.000 fieles del movimiento los que acudieron a una cita sin precedentes con el sumo pontífice. El sábado 05 de mayo en la capital italiana aconteció la primera reunión del papa Francisco con el Camino Neocatecumenal fuera de las paredes del Vaticano. La llamada era clara, celebrar el medio siglo de vida como cántico de alabanza al Espíritu Santo, que ha guiado esta realidad eclesial y llevado a la Evangelización «asumiendo riesgos», como bien señaló el santo padre.
Feligreses neocatecumentales de todo el planeta celebraron con Kiko Argüello, Mario Pezzi (iniciadores del camino junto a Carmen Hernández, fallecida en 2016) y María Ascensión Romero (los tres forman el equipo responsable internacional de Evangelización) las maravillas que Dios ha hecho con el movimiento durante tantos años. Al encuentro fueron unos setenta peregrinos de distintas parroquias de la diócesis de Segorbe-Castellón, además del seminario Redemptoris Mater, todos ellos repartiéndose en dos peregrinaciones.
Las palabras del sumo pontífice al Camino Neocatecumenal
Tras el anuncio del Kerigma por parte de Kiko y de las palabras del resto del equipo, Francisco acreditó a los fieles del camino un ADN con clara «vocación de anunciar viviendo en familia, siguiendo el ejemplo de la Sagrada Familia en humildad, simplicidad y alabanza«. Igualmente, el sumo pontífice agradeció al Padre el «don que supone el Camino Neocatecumenal para la Iglesia«, uno carisma que debía ser cuidado y contemplado como una verdadera herramienta de Dios para el hombre de hoy. Del mismo modo, el sucesor de Pedro exhortó a seguir «asumiendo riesgos», y en tono más escatológico habló de que «solo una Iglesia desvinculada del poder y del dinero, libre de triunfalismos y clericalismos ofrece testimonio creíble de que Cristo libera al hombre».
Uno de los pilares de todo encuentro del Camino Neocatecumenal que tampoco faltó fue el envío de las missio ad gentes por el santo padre. En este caso fueron 34 (cada una integrada por un presbítero y cinco o seis familias) que el papa enviaba a países como Tanzania, Sudáfrica, Turquía, India o Corea. Siguiendo con su derroche de cumplidos, animó a las futuras familias en misión diciéndoles «estoy con ustedes, gracias por el sí que han dicho, por haber acogido el llamado del Señor a vivir el Evangelio». Asimismo, 25 comunidades fueron enviadas a las periferias de Roma, fieles que ya han terminado el itinerario de renovación del Bautismo y por llamada de los párrocos y los obispos van en ayuda de las parroquias más vacías.
Estas fueron algunas de las palabras más importantes que dio con motivo del Encuentro (aquí se puede ver todo el discurso).
A la celebración también acudieron 16 cardenales (incluidos monseñores Carlos Osoro como arzobispo de Madrid, Ricardo Blázquez, de Valladolid, y Rouco Varela, emérito de la capital española) y más de 90 obispos como mons. José Ignacio Munilla (de san Sebastián) y mons. Juan Antonio Reig Pla (de Alcalá de Henares y hasta 2005 de Segorbe-Castellón).
La cita cerró con el canto Están rotas mis ataduras, el Padrenuestro, la Bendición final y su ya tradicional himno Te Deum, un cántico de alabanza al que Kiko puso melodía propia y que ha servido para ensalzar el amor y la fidelidad de Cristo.
Más palabras del papa Francisco al Camino Neocatecumenal:
«Hay que tener cuidado, por ejemplo, para no dictar el paso a los demás. Más bien, hay que acompañar y esperar, recordando que el camino del otro no es idéntico al mío.»
«Con cuidado y respeto por el camino de cada uno y sin forzar el crecimiento de nadie, porque la respuesta a Dios madura solo en la libertad auténtica y sincera.»
«En la fe y en la misión se avanza juntos, sin aislarse y sin imponer el propio sentido de marcha, se avanza unidos, como Iglesia, con los pastores, con todos los hermanos».
«”Id y haced discípulos a todas las gentes”. Y cuando Jesús dice todas parece que quiera subrayar que en su corazón hay lugar para cada gente. Nadie está excluido.»
Más palabras de Francisco al Camino Neocatecumenal:
««Como los padres, que no ven en primer lugar los defectos y las faltas de sus hijos, sino a sus propios hijos y con esta perspectiva acogen sus problemas y sus dificultades, también así hacen los misioneros con las gentes amadas por Dios. No ponen en primera fila los aspectos negativos y las cosas para cambiar, sino que «ven con el corazón», con una mirada que aprecia, un enfoque que respeta, una confianza que tiene paciencia.»
««Amad las culturas y tradiciones de las gentes, sin aplicar modelos preestablecidos.»
«No partáis de teorías y esquemas, sino de situaciones concretas: así será el Espíritu el que dará forma al anuncio según sus tiempos y sus formas. Y la Iglesia crecerá a su imagen: unida en la diversidad de las gentes, de los dones y de los carismas.»