Alpha grita 'sumérgete' en el Encuentro de profundización de la Fe en el Mater Dei

Desde el jueves 28 de junio hasta hoy domingo 1 de julio, Alpha ha organizado su segundo encuentro ‘Sumérgete’ de profundización en la Fe y la experiencia de Dios en la actualidad del cristiano.

Alpha se trata de un conjunto de sesiones que pretenden explorar la Fe en Jesucristo, basándose cada una de ellas en una pregunta distinta sobre la experiencia cristiana y llegando todas ellas a una conversación con el otro. Siendo una realidad prácticamente universal, en 2017 vio la «necesidad apremiante que existe en la Iglesia de profundizar en la presencia de Dios a través del Espíritu Santo», por lo que se decidió organizar un encuentro que diera pie a ello.

‘Sumérgete’ trata de atender esa urgencia, y dados los muchos frutos surgidos del mismo encuentro del año pasado, los miembros de Alpha han querido repetir esta vez en la diócesis de Segorbe-Castellón, concretamente en el Seminario Diocesano Mater Dei. Aproximadamente han asistido más de 300 personas, la mayoría fieles que se dedican a catequizar y evangelizar.

Alpha presenta un programa muy completo

«Evangelizadores con espíritu quiere decir evangelizadores que se abren sin temor a la acción del Espíritu Santo». Esta es la cita de la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium del Papa Francisco que Alpha emplea como impulso para el encuentro. Por ello comenzó el pasado jueves por la tarde con una acogida, una cena y un momento de oración.

El viernes, día con más actividades, tuvo actos tan importantes como una Eucaristía, en la que el Padre Ángel Hernández, Vicario de Pastoral de la diócesis de Osma-Soria, centró su homilía en «el poder que viene del Bautismo»; también hubo varias charlas como ‘Hirvientes en el Espíritu’ de José Alberto Barrera (coordinador nacional de los cursos Alpha) y ‘Recuperando nuestra identidad’ de Miguel Oracio (responsable de la célula Marcos de la Comunidad Siervos de Cristo Vivo).

Alpha también organizó muchos actos para el sábado, siendo los más importantes la Misa, la charla ‘Maravillas, milagros y señales’ de Miguel Oracio, los talleres y la noche de sanación también con Miguel Oracio. Ya para el domingo quedó una última Eucaristía, los testimonios y el cierre del encuentro. Por supuesto, las cuatro jornadas contaron con desayunos, comidas y cenas en fraternidad, tiempos de descanso y piscina, oración y confesiones.