La diócesis celebra con Vila-real a San Pascual, testigo de la Misericordia
Hoy se ha celebrado a San Pascual Baylón, patrón de Vila-real y de la diócesis. La eucaristía que ha tenido lugar a las 11h de la mañana, ha estado presidida por Mons. Casimiro López y concelebrada por una treintena de sacerdotes y donde han participado también multitud de fieles. Por la tarde, pasadas las 18.30h, la imagen del santo de la eucaristía ha salido de la Basílica para procesionar por las calles de Vila-real.
Durante la misa, el Obispo de Segorbe-Castellón ha destacado las cualidades de este «joven austero y sacrificado, amante de la verdad y honrado, alegre y generoso con todos y amante de la Eucaristía». Y en este sentido ha afirmado que «los santos como Pascual, nos sitúan en la verdad de nuestra persona, de nuestra vida, de nuestro origen y nuestro destino. Sin Dios no somos nada: no hay esperanza, sin Dios nos quedamos en la trivialidad y vulgaridad», ha insistido el prelado.
Algo que caracterizó la vida y la persona de san Pascual fue su inmenso amor a la Eucaristía, amor que aprendió en casa, en su propia familia. El joven fraile alcantarino fue un «testigo de la misericordia de Dios, precisamente porque fue humilde y se dejó amar por Jesucristo en la Eucaristía». En este Año Jubilar de la Misericordia, Pascual es un testimonio en el que fijarse, él supo llevar la misericordia de Dios a todos. En este sentido, Mons. Casimiro López ha puesto de relieve que, como Pascual, » todos estamos llamados a dar de comer al hambriento y de beber al sediento, a visitar a cuidar a los enfermos, a dar posada al forastero, vestir al desnudo, enseñar al que no sabe, dar buen consejo a quien lo necesita, perdonar de corazón a quien nos ofende, a consolar al triste, a rezar por los vivos y por los difuntos…»
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