De Benicasim a Polonia, peregrinos llevados por san Juan Pablo II
Poco se hará en toda una vida para llegar a mostrar el agradecimiento suficiente a una figura como la de san Juan Pablo II, el papa que marcó la vida de millones de personas con su incansable labor evangelizadora.
Son ya 13 años los que han transcurrido desde el adiós definitivo del difunto pontífice a su vida mortal, puesto que el umbral de la muerte ya lo traspasó para saborear una auténtica Vida Eterna junto al Padre. Son incontables los frutos que el papa de los jóvenes dio por su copioso trabajo de llevar a Cristo a todo hombre, y no de los más jugosos, del que se han aprovechado muchos fieles, es la peregrinación.
De Benicasim a Polonia acompañados por san Juan Pablo II
«Asombrados del patrimonio espiritual de esta tierra». Estas son las palabras que los 20 peregrinos de la parroquia santo Tomás de Villanueva de Benicasim han expresado en su peregrinación a la ciudad del difunto sumo pontífice. Aunque todavía están por aquellas tierras (retornan a Castellón el próximo domingo II de Pascua), ya han dado muchas muestras de gratitud a un pueblo que «siempre ha puesto su confianza en Dios en sus múltiples sufrimientos«, asentando así «su identidad cristiana».
Y en esta peregrinación no podía faltar una visita a dos lugares emblemáticos para todo católico: el santuario de la Divina Misericordia, donde está la tumba de santa Faustina Kowalska, y la casa de Karol Wojtyła, donde vivió antes de ser nombrado arzobispo.
Tal y como ha comentado Don Luis Oliver, el primer objetivo de esta peregrinación era «orar por el Encuentro Mundial de las Familias» que se celebrará al finales del próximo mes de agosto en Dublín (Irlanda), ante todo bajo la intercesión del «papa de la familia», tal y como lo nombraba el papa Francisco.
Concretando más, el párroco ha buscado pedir también por las obras del templo dedicado a san Juan Pablo II en Benicasim, puesto que están paradas desde hace 15 años. Por último, los peregrinos han suplicado al Padre por las familias de la diócesis de Segorbe-Castellón y por «las intenciones de la Delegación de Pastoral Familiar«. El grupo de viajeros tiene previsto volver el próximo domingo II de Pascua.
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