El acompañamiento a las personas y comunidades y la Comisión para el Sostenimiento de la Iglesia protagonizan el último Consejo Presbiteral del curso
Los miembros del Consejo Presbiteral Diocesano se reunieron ayer, martes 11 de junio, en la que fue la última sesión del curso, antes del verano. La mañana comenzó, como siempre, con la oración y la exposición del Santísimo Sacramento en la capilla del Seminario Mater Dei de Castellón. A continuación, siguió la reunión que tuvo lugar en la Biblioteca y que se inició con la aprobación del acta de la sesión anterior y las palabras de bienvenida del Obispo de la Diócesis de Segorbe-Castellón, D. Casimiro López.
El Obispo recordó el objetivo del próximo Curso Pastoral: el acompañamiento. Sin olvidar, que el Primer Anuncio debe estar de forma permanente en nuestra tarea evangelizadora. «El Papa Francisco insiste mucho en el tema del acompañamiento tanto de la comunidad como de las personas», dijo. «La Iglesia tiene que acompañar a la humanidad. Acompañamiento para madurar en el acompañamiento a Cristo. Teniendo claro que acompañar no es sólo dar consejos sino escuchar para que las personas muestren sus gozos, sus penas», destacó. «El acompañamiento necesita de paciencia y de misericordia. Y una misericordia sin prejuicios es muy importante. Por eso, el acompañamiento está ligado a la Dirección Espiritual y a la Penitencia», puntualizó el Obispo. Y concluyó: «Nosotros los sacerdotes necesitamos ser acompañados para después acompañar a otros».
Después, intervino D. Miguel Abril, Vicario de Pastoral de la Diócesis; para comentar el borrador de la Programación Diocesana Pastoral para el curso 2024-2025, destacando la importancia del ser «llamados a ser comunidad que acoge y acompaña a las personas. Favoreciendo el acompañamiento de las personas que, en sus anhelos y necesidades; puedan alcanzar una vida más plena y evangélica vinculándose más fuertemente a la Iglesia». Y recordó que este próximo curso la Jornada de Inicio tendrá lugar el sábado 21 de septiembre.
D. Javier Aparici, Vicario General de la Diócesis; informó sobre la creación de la Comisión Diocesana para el Sostenimiento de la Iglesia. Explicando lo que significa la corresponsabilidad y la autofinanciación e insistiendo en la importancia de crear conciencia sobre lo que supone ser y estar en la Iglesia. Estimulando los dones del tiempo, las cualidades y la oración de los fieles. D. Casimiro dejó claro respecto a esta cuestión que «no pensemos sólo en el dinero. Hemos de sensibilizar a la comunidad cristiana de su pertenencia a la Iglesia, de su vida y misión».
Finalmente, el ecónomo diocesano, D. Vicente Gómez; informó sobre el estado actual de la economía (ingresos, gastos, préstamos, donativos, subvenciones…). La sesión concluyó con una comida de fraternidad en el mismo Seminario Diocesano.