Bajo el lema “Caminar juntos en el anuncio de Jesucristo” hoy ha tenido lugar el Encuentro Diocesano de catequistas y profesores de Religión, organizado por la Delegación diocesana para la Catequesis y el Catecumenado en el Seminario Mater Dei.
Palabra y Eucaristía, fuente y centro del cristiano y de la Iglesia
La Jornada ha comenzado con la acogida, y a continuación se han reunido para escuchar la Palabra de Dios y celebrar la Eucaristía, que ha sido presidida por el Obispo de la Diócesis. En la homilía, D. Casimiro ha recordado que lo más importante del Encuentro es “Cristo Jesús, muerto y resucitado, para que todo el que crea en Él tenga vida eterna”, es “la fuente de nuestra vida personal y comunitaria”.
Tiempo de gracia, Jesús sale a nuestro encuentro
Este “es un tiempo de gracia que nos concede el Señor”, ha indicado, más aún este año en el que vamos a iniciar el Jubileo Diocesano, el día 12 de abril. “Jesús sale a nuestro encuentro porque quiere que avivemos nuestra fe, que le sigamos para ser sus discípulos misioneros, evangelizados y evangelizadores”. Ha recalcado que “para ser misioneros primero hay que seguir a Jesús, y para ser evangelizadores en la Catequesis, en la clase de Religión, en nuestro ministerio…, primero hemos de ser evangelizados”.
Tiempo de Cuaresma, tiempo de conversión
Y el tiempo de Cuaresma es un tiempo propicio para ello, “para nuestra conversión, para nuestra purificación, renovación y reconciliación – decía nuestro Obispo – todos necesitamos convertirnos al Señor”. Ha exhortado también a “escrutar nuestro corazón para volver nuestra mirada a Dios”, porque “sin esa conversión personal y comunitaria no podremos anunciar al Señor como Él desea”, sino le ponemos a Él “en el centro de nuestra vida y de nuestra misión poco podemos hacer”.
Tiempo de Jubileo Diocesano, para crecer en comunión y salir juntos a la misión
El Jubileo también es un tiempo “para crecer en comunión y salir juntos a la misión desde la oración, desde la Eucaristía, con una vida coherente con la fe que profesamos en el seguimiento del Señor”, porque “atrae la persona que es coherente con la fe y que vive con alegría su misión”.
Nuestra misión es, ha recordado D. Casimiro, llevar a otros la Buena Noticia del Señor, también a los alejados, para que todos se encuentren con Él, para que el catequizado pueda ser también un misionero del Señor. Eso “se cuida y se potencia cuando uno está enamorado del Señor, sabiendo que Él es el mayor bien que se nos ha dado y que es lo más grande que podemos comunicar a otros”.
Fano habla de cómo catequizar a niños con el dibujo
Tras la celebración de la Eucaristía, los catequistas y docentes se han reunido para escuchar a Patxi Velasco, más conocido como Fano, que con sus dibujos y su testimonio de cristiano comprometido ha ayudado a los asistentes en la tarea de educar en la fe con una ponencia que llevaba por título “Educar para la felicidad”.
Fano es ilustrador y maestro en el “CEIP María de la O”, en la barriada malagueña de Los Asperones. Pertenece a la comunidad cristiana “María de Nazaret” de la Parroquia de Santa María de la Amargura, y su labor pastoral la desarrolla como catequista en el barrio donde está enclavado su colegio. Vive su faceta de dibujante como una vocación al servicio de la comunidad y reconoce que sus dibujos son su manera de expresarse y compartir la fe.
Acompañado de sus dibujos y de su elocuencia, ha entusiasmado y emocionado a todos los presentes, arrancando de todos los asistentes un vivo y entusiasmado aplauso. De manera didáctica y simpática ha recordado que es el encuentro personal con Jesús lo que cambia la vida y te llena de color, que Él es el gancho que lleva a los niños a conocer al Padre y su amor. También ha señalado que el Señor es la luz que, pasando por la Iglesia, nos hace ser luz para los demás, y que Él es también agua de la que todos nos podemos llenar, para posteriormente regar y servir a los demás. Ya por la tarde ha desarrollado un taller de recursos creativos para el proceso de Iniciación Cristiana.
El próximo sábado, día 5 de marzo, el Seminario Mater Dei acogerá la celebración del Encuentro Diocesano de catequistas y profesores de religión, al que también pueden unirse todas aquellas personas que lo deseen, de las parroquias o colegios de la Diócesis.
La Jornada, organizada por la Delegación diocesana para la Catequesis y el Catecumenado, comenzará a las 9:30 h con la acogida, y a continuación se celebrará la Eucaristía, que estará presidida por nuestro Obispo, D. Casimiro.
Además, se contará con la asistencia de Patxi Velasco, más conocido como Fano, que con sus dibujos y su testimonio de cristiano comprometido ayudará a los asistentes en la tarea de educar en la fe.
Es posible comer en el Seminario, lo que deberá comunicarse antes de mañana, día 2 de marzo, al correo electrónico catequesis@obsegorbecastellon.org
Mañana comienza en Segorbe la escuela de catequistas, tras haber finalizado en Castellón. Como ya indicó el Delegado diocesano para la Catequesis y el Catecumenado, D. Carlos Asensi, este curso es especialmente importante, ya que está “marcado por la Reflexión Diocesana, que también nos remite al Sínodo sobre la sinodalidad del año 2023, y por el Año Jubilar diocesano por el 775º aniversario de la sede episcopal segorbina”.
Así, mañana sábado día 12 de febrero comenzará el segundo módulo del curso de catequistas en Segorbe, en el Seminario Menor Diocesano. En total serán cuatro sábados de formación: 12 y 19 de febrero, 26 de marzo y 2 de abril. Cabe recordar que el curso completo consta de tres módulos que se imparten durante tres años consecutivos: el ser, el saber y el hacer del catequista.
Las sesiones son presenciales y la metodología es activa, participativa y expositiva, para lo cual se entrega el material necesario, así como la documentación complementaria con el fin de ofrecer la posibilidad de ahondar en los contenidos.
Durante estos días, los ganadores del II Concurso Fotográfico de Belenes Familiares de la Diócesis han recogido muy agradecidos su merecido premio, consistente en un diploma acreditativo y un lote de películas con valores y temática católica.
Cabe indicar que esta nueva edición también ha estado organizada por la Delegación de Medios de Comunicación Social junto a la Delegaciones para la Catequesis y el Catecumenado.
Primer premio: Javier Rubert Cándido, de Vila-real.
Segundo premio: Eduardo Delgado García, de Almenara.
Organizado por la Delegación de Medios de Comunicación Social junto a la Delegaciones para la Catequesis y el Catecumenado, la segunda edición del Concurso Fotográfico de Belenes Familiares de la Diócesis de Segorbe-Castellón ya tiene ganadores.
El jurado designado ha valorado la originalidad artística, la recuperación del belén tradicional, los materiales utilizados, el esfuerzo y la laboriosidad en su ejecución. Cabe indicar que no ha sido una decisión sencilla, ya que ha quedado patente el esfuerzo y la implicación de muchas familias, que han realizado un importante trabajo manual.
Así pues, los ganadores de esta segunda edición son los siguientes:
Primer premio: Javier Rubert Cándido, de Vila-real.
Segundo premio: Eduardo Delgado García, de Almenara.
Tercer premio: Familia Marti-Diago, de Onda.
Enhorabuena a los premiados. Recibirán un diploma acreditativo y un lote de películas con valores y temática católica.
Con el inicio del mes de diciembre se renuevan las intenciones de oración que propone el Papa Francisco y la Conferencia Episcopal Española. El Papa dirige su intención para la evangelización por los catequistas: “Recemos por los catequistas, llamados a proclamar la Palabra de Dios: para que sean testigos de ella con valentía, creatividad y con la fuerza del Espíritu Santo”.
“¡Sed catequistas!, no trabajéis de catequistas: ¡esto no sirve! Yo trabajo de catequista porque me gusta enseñar. Pero si no eres un catequista, no sirve. ¡No serás fecundo, no serás fecunda! Ser catequista es una vocación: ser catequista, esta es la vocación, no trabajar de catequista. Prestad atención, no he dicho hacer de catequista, sino serlo, porque involucra la vida. Lleva al encuentro con Jesús con las palabras y con la vida, con el testimonio”.
“A menudo pienso en el catequista como aquel que se ha puesto al servicio de la Palabra de Dios, que frecuenta esta Palabra diariamente para hacer de ella su alimento y participarla con los demás con eficacia y credibilidad. El catequista sabe que esta Palabra está viva (Hb 4:12) porque constituye la regla de la fe de la Iglesia (cf. Conc. Ecum. Vat. II, Dei Verbum, 21; Lumen Gentium, 15). En consecuencia, el catequista no puede olvidar, especialmente hoy en un contexto de indiferencia religiosa, que su palabra es siempre un primer anuncio. Pensadlo bien: en este mundo, en esta área de tanta indiferencia, vuestra palabra siempre será un primer anuncio, que llega a tocar el corazón y la mente de muchas personas que están a la espera de encontrar a Cristo. Incluso sin saberlo, pero lo están esperando. Y cuando digo el primer anuncio no lo digo solo en el sentido temporal. Por supuesto, esto es importante, pero no siempre es así. ¡El primer anuncio equivale a subrayar que Jesucristo muerto y resucitado por el amor del Padre, da su perdón a todos sin distinción de personas, si tan solo abren sus corazones para dejarse convertir! A menudo no percibimos el poder de la gracia que, a través de nuestras palabras, llega profundamente a nuestros interlocutores y los moldea para que puedan descubrir el amor de Dios. El catequista no es un maestro o un profesor que cree que da una lección. La catequesis no es una lección; la catequesis es la comunicación de una experiencia y el testimonio de una fe que enciende los corazones, porque introduce el deseo de encontrar a Cristo. ¡Este anuncio de varias maneras y con diferentes idiomas es siempre el “primero” que el catequista está llamado a dar!”.
Por otra parte, la intención de oración de la Conferencia Episcopal Española (CEE), por la que también reza la Red Mundial de Oración del Papa, es “por los sacerdotes y diáconos, para que vivan siempre en fidelidad a la vocación recibida, y vean confortada su entrega a Dios y a la Iglesia por el amor y respeto de sus fieles”.
Nuestro Obispo, D. Casimiro, en su carta del 5 de diciembre de 2020, nos decía que “para seguir las huellas del Buen Pastor, la vocación de pastor pide una entrega total, una entrega de amor, que compromete toda la vida. Puede que hablar de una entrega total de sí mismo y para siempre, resulte hoy especialmente difícil. Pero, es preciso ser claros y fieles al modo como Jesús y la Iglesia nos enseña a recibir esta vocación sacerdotal. En el desarrollo y la maduración de la vida cristiana de niños, jóvenes y adultos, hay etapas y altibajos, pero lo importante es saber orientar un camino que, confiando en la gracia del Señor, mira siempre a una entrega más grande y total”.
El pasado viernes, 26 de noviembre, se celebró la primera Vigilia de catequistas de este nuevo curso pastoral bajo el lema «Catequistas, mensajeros de alegría y esperanza”. Coincidiendo con el fin del año litúrgico y el comienzo del Tiempo de Adviento, convocados por la Delegación diocesana de Catequesis, se celebró esta Vigilia en la Parroquia de Lucena con la presencia de catequistas de las parroquias del arciprestazgo. Así mismo, se ha enviado la reflexión a todas las parroquias para que a lo largo de este Adviento pueda celebrarse con los grupos de catequistas en sus parroquias y sentirnos comunidad diocesana que ora unida y camina de la mano del Señor en la misma misión.
El objetivo de la Vigilia fue disponerse como catequistas ante Dios en este tiempo tan especial y renovar así la vocación para ser mensajeros de esperanza en una sociedad que, como la actual, tiende a la tristeza, la depresión y la desesperanza. Ante todo esto, tal como aseguró el delegado diocesano de catequesis, Carlos María Asensi, «no podemos quedarnos pasivos, pues aún hay esperanza». La estructura de la Vigilia invitó a mirar el interior de cada uno para descubrir «la verdadera necesidad de una luz que nos alumbre para vivir este tiempo con intensa esperanza, al igual que María, mujer del Adviento, que «fue la primera catequista que vio cómo crecía la esperanza en su interior» y “supo esperar en cuerpo y alma la venida del Mesías».
Durante la oración se invitó a los participantes a vivir el Adviento como un tiempo de gracia y de esperanza como preparación a la venida de Jesús , conmemorando su venida histórica. A partir de la lectura de la Palabra (Isaías 9, 1-6) y la exposición del Santísimo para que Dios hablara directamente al corazón de cada uno, la reflexión se centró en la luz que da sentido a su caminar como catequistas y que les cambia la vida
Esta mañana, la S.I. Concatedral de Santa María, en Castellón, ha acogido la Eucaristía en la que nuestro Obispo, D. Casimiro, ha enviado a los catequistas y ha entregado la Missio Canónica a los profesores de Religión y Moral Católica.
Ha acudido una amplia representación de aquellos que catequizan en las parroquias o enseñan en los centros educativos de la Diócesis, que comprometidos con la fe de la Iglesia y fieles a la vocación cristiana, responden al Señor y afrontan la tarea que Él pone en sus manos, de llevarle a los demás.
El Obispo, en la homilía les ha invitado a “caminar juntos para crecer en comunión y salir renovados a la misión”. “Vuestra tarea no es algo que os habéis adjudicado personalmente”, sino “que evangelizáis en la catequesis, enseñáis en la escuela, no en nombre propio sino en nombre del Jesús, una llamada que os llega a través de la llamada del Obispo, en la Iglesia”, les ha dicho, “eso es lo que celebramos”.
Ante las dificultades que encuentran a diario los catequistas y profesores, también ataques, el Obispo les ha exhortado a escuchar la Palabra y a buscar el rostro de Dios. Para ello, hoy se ha centrado en tres palabras: Espíritu, conversión y frutos.
“Acojamos la acción del Espíritu”
“Abramos nuestro corazón a la acción del Espíritu”, ha dicho, “porque sin Él no podemos hacer nada”, pues es quien “nos lleva una vez más al encuentro con el Señor resucitado, el Maestro interior que nos ayuda a conocer a Jesús, a encontrarnos con Él, a recuperar nuestra fe”.
En relación a la primera lectura proclamada, Rm. 8, 1-11, ha explicado que el deseo del Espíritu es vida y paz, “desear que todos aquellos que el Señor ponga en vuestras manos tengan Vida, la Vida que brota de Dios a través del Señor Jesús, muerto y resucitado para que en Él tengamos Vida”. Para ello es necesario “abrir nuestro corazón a la acción del Espíritu, ser dóciles a lo que Él nos va diciendo, acoger también su fuerza en la debilidad, su aliento en el desfallecimiento, Él es el que alienta a nuestra Iglesia”.
Una conversión personal, pastoral y misionera
«Si no os convertís, todos pereceréis», ha dicho D. Casimiro citando el Evangelio de Lc. 13, 1-9. “Una conversión personal al Señor” es “una tarea diaria, porque no es solo volver la mirada a Dios sino renovarse desde dentro, dejarse purificar, y eso es algo que hay que cultivar en el encuentro con el Señor a través de la lectura orante de su Palabra, del encuentro con Él en la Eucaristía, porque sino, vuestra vida como cristianos se irá debilitando y apagando”, ha advertido.
También es precisa una conversión pastoral “para transmitir la fe y ayudar a que los niños vayan creciendo como cristianos creyentes, testigos y discípulos del Señor, y que lleve a una conversión misionera”. En la catequesis y en la clase de Religión, “en el centro siempre ha de estar Jesucristo, pero habrá que renovar los métodos”, ofreciendo siempre la doctrina de la Iglesia, el Evangelio, “para que llegue a aquellos que el Señor ha puesto en nuestras manos”, decía. “Hay que seguir formándose, es fundamental una formación permanente para cumplir debidamente la misión”, les ha pedido.
Sembrar bien para que haya frutos
“Vuestra tarea es sobre todo sembrar, pero sembrar bien”, pues “no sembramos cualquier cosa sino al Señor, su Evangelio, la doctrina y la moral de la Iglesia, ayudando a los catequizandos a que vayan creciendo como cristianos, discípulos misioneros del Señor”, ha dicho a profesores y catequistas, “proponiéndoles lo mejor que tenemos en nuestras manos, que es Cristo Jesús, muerto y resucitado”.
“Antes que nada sois cristianos”, les ha recordado, pues “no se puede ser catequista o profesor de Religión “si uno no vive la fe que, en nombre de la Iglesia, ha de ofrecer a otros”, sería una contradicción “no estar en comunión con Cristo y con la Iglesia”.
Tras ello, tanto los profesores como los catequistas, ante el Obispo, Pastor de la Iglesia que peregrina en la Diócesis de Segorbe-Castellón, han aceptado la misión, han renovado su compromiso bautismal y han profesado la fe de la Iglesia.
La Delegación diocesana de Catequesis y la de Enseñanza han organizado una jornada en la que serán enviados los catequistas de la Diócesis, y será entregada la Missio canónica a los profesores de Religión y Moral Católica, por parte de nuestro Obispo, D. Casimiro.
Será con la celebración de la Eucaristía, el próximo sábado 23 de octubre a las 11 h., en la S.I. Concatedral de Santa María, en Castellón. En ella, los profesores y catequistas renovarán su compromiso bautismal y profesarán la fe de la Iglesia.
Esta web utiliza 'cookies' propias y de terceros para ofrecerte una mejor experiencia y servicio. Pulsando en "aceptar" consientes el uso de todas las cookies, pero puedes cambiar la configuración de 'cookies' en cualquier momento.
Como la mayoría de los servicios en línea, nuestro sitio web utiliza cookies propias y de terceros para varios propósitos. Las cookies de origen son principalmente necesarias para que el sitio web funcione correctamente y no recopilan ninguno de sus datos de identificación personal.
Las cookies de terceros utilizadas en nuestros sitios web se utilizan principalmente para comprender cómo funciona el sitio web, cómo interactúa con nuestro sitio web, mantener nuestros servicios seguros, proporcionar anuncios que sean relevantes para usted y, en general, brindarle una mejor y mejor experiencia del usuario y ayudar a acelerar sus interacciones futuras con nuestro sitio web.
Cookies Necesarias
Algunas cookies son esenciales para que pueda experimentar la funcionalidad completa de nuestro sitio. Nos permiten mantener las sesiones de los usuarios y prevenir cualquier amenaza a la seguridad. No recopilan ni almacenan ninguna información personal. Por ejemplo, estas cookies le permiten iniciar sesión en su cuenta y agregar productos a su carrito y pagar de forma segura.
Respetamos completamente si desea rechazar las cookies, pero para evitar preguntarle una y otra vez, permítanos almacenar una cookie para eso. Puede optar por no participar en cualquier momento u optar por otras cookies para obtener una mejor experiencia. Si rechaza las cookies, eliminaremos todas las cookies establecidas en nuestro dominio.
Le proporcionamos una lista de las cookies almacenadas en su computadora en nuestro dominio para que pueda verificar lo que almacenamos. Por razones de seguridad, no podemos mostrar ni modificar cookies de otros dominios. Puede comprobarlos en la configuración de seguridad de su navegador.
Cookies para Google Analytics
Estas cookies almacenan información como el número de visitantes al sitio web, el número de visitantes únicos, qué páginas del sitio web se han visitado, la fuente de la visita, etc. Estos datos nos ayudan a comprender y analizar qué tan bien funciona el sitio web y donde necesita mejorar.
Si no desea que rastreemos su visita a nuestro sitio, puede deshabilitar el rastreo en su navegador aquí:
Otros servicios externos
También utilizamos diferentes servicios externos como Google Webfonts, Google Maps y proveedores de video externos. Dado que estos proveedores pueden recopilar datos personales como su dirección IP, le permitimos bloquearlos aquí. Tenga en cuenta que esto podría reducir considerablemente la funcionalidad y la apariencia de nuestro sitio. Los cambios entrarán en vigor una vez que vuelva a cargar la página.
Google Webfont:
Google Maps:
Google reCaptcha:
Vimeo and Youtube videosembeds:
Política de Privacidad
Puede leer sobre nuestras cookies y la configuración de privacidad en detalle en nuestra Página de Política de Privacidad.