La Residencia de Ancianos de Cáritas de Burriana lleva el confinamiento con tranquilidad y esperanza
La Residencia de Ancianos de Cáritas Interparroquial de Burriana tiene 58 residentes y una plantilla de 37 trabajadores, compuesta por auxiliares, psicólogos, fisioterapeutas, y personal de limpieza y de cocina, aunque según Pilar de Miguel, directora del centro, durante este tiempo se ha reforzado la plantilla de auxiliares y de limpieza.
Pilar cuenta que “al principio vivimos esta situación con incertidumbre, y veíamos que el desinfectante, las mascarillas y los guantes que necesitábamos no llegaban”. “Lo que se solucionó gracias a los dos envíos de este material que ya ha realizado la Conselleria de Sanidad, y al desinfectante que nos está proporcionando gratuitamente la empresa Satine Stone de Burriana”.
La residencia también ha recibido la visita en dos ocasiones de la Unidad Militar de Emergencias (UME), para desinfectar las instalaciones, concretamente el jardín, las escaleras y los pasillos, aunque el propio personal de limpieza también desinfecta a fondo el emplazamiento todos los días.
Lo que también está tranquilizando, tanto a personal como a residentes, son las llamadas periódicas que les hace Unidad de Hospitalización Domiciliaria (UHD) del Hospital La Plana de Vila-real, para preguntar por el estado de los residentes y para resolver posibles dudas que puedan tener.
“Lo que peor han llevado los residentes es, por una parte el confinamiento en sus respectivas habitaciones, y por otra que no pueden recibir visitas de sus familiares, pero han entendido la situación y están poniendo todo de su parte”, explicar Pilar.
Pero por las tardes, a estas personas se les da la opción de ponerse en contacto con sus familiares mediante una sesión de videoconferencia, “y están encantados, pues para ellos ha sido una novedad”.
A pesar de que se suspendió la Santa Misa que se oficiaba en la capilla diariamente, continua la responsable del centro, “por responsabilidad y siguiendo las recomendaciones del Obispo y de las autoridades, nuestros mayores siguen las misas retransmitidas por televisión en su habitación, viviendo la comunión espiritual”.
Pilar de Miguel ha querido agradecer, “sobre todo la atención recibida y la oración por parte del Obispo, D. Casimiro, que también nos llama para preguntar como estamos y ver si necesitamos algo, lo que nos llena de tranquilidad y esperanza, porque sabemos que nuestro pastor está pendiente de nosotros”, concluye.